La guerrilla albanesa se esfuma tras la ofensiva del Ejército macedonio
Confusión sobre el número de víctimas y el paradero de los rebeldes
Como consecuencia de la ofensiva del domingo, cientos de refugiados albaneses abandonaron aterrorizados las aldeas primero bombardeadas y después tomadas por el Ejército macedonio. Testigos presenciales constataron ayer que varios de los pueblos recuperados por las Fuerzas Armadas se encontraban desiertos y convertidos en una especie de tierra de nadie, sin presencia militar ni guerrillera aparente.
En la noche de ayer se esperaba en Skopje la visita del secretario general de la OTAN, George Robertson, y del jefe de la Política Exterior y de Seguridad de la Unión Europea, Javier Solana. Los emisarios de la OTAN y la UE anticiparon su intención de influir sobre el Gobierno de Macedonia para que actúe con moderación y acelere el diálogo con los partidos legales albaneses. El portavoz gubernamental, Antonio Milososki, anunció que se indemnizará a los afectados por los daños en las acciones de las últimas semanas.
Los portavoces gubernamentales dieron cuenta ayer de 54 heridos en las acciones militares del domingo, pero no especificaron si se trataba de civiles o militares. Se informó de la muerte de un soldado en un accidente. No quisieron los portavoces informar sobre las bajas causadas al ELN. Bajo cuerda, uno de los voceros lanzó luego la cifra de 60 guerrilleros muertos, pero esto presenta todo el aspecto de una intoxicación interesada.
El ELN parece haberse esfumado. Todo parece indicar que algunos pasaron por la frontera hacia Kosovo, donde la fuerza internacional (Kfor) capturó a algún guerrillero despistado. Otra parte podría haberse quitado el uniforme, escondido las armas y puesto en situación de espera de una nueva oportunidad. Algunos balcanólogos esbozan la hipótesis de que el ELN ha nacido de un grupo próximo a la ideología maoísta del difunto líder albanés Enver Hoxha. En este caso, Macedonia podría encontrarse ante la estrategia llamada de 'guerra popular prolongada'.
La guerrilla parece derrotada, pero ha logrado sin duda alcanzar un primer objetivo. La acción de los militares macedonios dañó a la población civil de las aldeas atacadas. En Bogovinje, un pueblo de 7.000 habitantes, acogió dos autobuses con 60 refugiados procedentes de Gajre, una de las aldeas más castigadas por la acción militar. Los refugiados no presentan el aspecto aterrorizado ni han sufrido las penalidades y los atropellos de los que huían de Kosovo hace dos años. Los refugiados en Bogovinje relataron a este periódico que se escondieron todo el día en el sótano desde el comienzo de los disparos. Por la tarde salieron cuando la policía les invitó, si lo querían, a subir a autobuses para trasladarlos a Tetovo. En la comisaría de esta ciudad, la policía sometió a los hombres a la prueba de la parafina para ver si habían disparado armas de fuego. Llama la atención la ausencia de hombres entre los refugiados, en su mayoría ancianos, mujeres y niños. Todos aseguraron no haber visto a un solo guerrillero del ELN en las últimas dos semanas. Si esto fuese cierto, la policía macedonia disparó durante 14 días contra fantasmas.
[Varios colaboradores del ex presidente yugoslavo Slobodan Milosevic fueron detenidos ayer en Belgrado por abuso de poder y otros delitos, según fuentes de la policía, citadas por la agencia Beta. Danilo Pantovic, alto cargo de la Izquierda Unida Yugoslava (JUL), el partido dirigido por la esposa de Milosevic, Mirjana Markovic, figura entre los detenidos].
La retaguardia está en Kosovo
Kosovo, la provincia serbia administrada por la ONU, ha servido de base de apoyo del Ejército de Liberación Nacional (ELN) que durante dos semanas mantuvo en jaque a las fuerzas armadas de Macedonia y paseó por el país el fantasma de una guerra civil. El ELN macedonio lleva en albanés las mismas siglas -UCK- que el Ejército de Liberación de Kosovo (ELK). Por eso, los guerrilleros, 'terroristas extremistas' según la terminología del Gobierno de Macedonia, ni siquiera tuvieron necesidad de tomarse la molestia de cambiar las insignias de los uniformes. El portavoz de la Fuerza Internacional de paz para Kosovo (Kfor), Martin Tracey, declaró ayer en Skopje que en ocho intervenciones en los últimos días efectivos de la Kfor capturaron a 26 personas sospechosas de conexiones extremistas, es decir, con el ELN. Tras la intervención del Ejécito macedonio del domingo, la Kfor detuvo a cuatro sospechosos, y en otras tres acciones, a otros diez. Además, se registró en Kosovo la entrada de 290 refugiados civiles procedentes de Macedonia que huían de los combates. La Kfor trasladó a parte de los sospechosos detenidos en Kosovo a la base del Ejército estadounidense de Camp Bondsteel. Otros han pasado a disposición de la policía de la ONU. En la Kfor no tienen claro qué ocurrirá con estos personajes. El Gobierno macedonio desea la extradición, si se confirma su ciudadanía macedonia. Skopje desea llegar a una colaboración con la Kfor en este campo, pero reconoce que está muy lejos de conseguirlo. El analista político Saso Ordanoski declaraba estos días a EL PAÍS sobre el problema con Kosovo: 'Es la primera vez en la historia de la humanidad en que un Estado soberano sufre el ataque de un protectorado internacional, ayudado por la mayor potencia militar mundial'.
