La Eurocámara exige una protección general contra la red anglosajona de espionaje Echelon
El Parlamento Europea le llama la gran oreja Echelon, un sistema de espionaje anglosajón muy sofisticado capaz de interceptar millones de comunicaciones vía satélite realizadas por ciudadanos particulares, empresarios o dirigentes políticos en todo el mundo. La comisión parlamentaria creada hace un año para investigar esa red aprobó la noche del martes en Estrasburgo un informe en el que confirma la existencia de Echelon y advierte del riesgo de que otros países puedan desarrollar sistemas similares si dispusieran de recursos financieros, entre ellos Rusia.
La Comisión Echelon fue creada en junio de 2000 con el objetivo de esclarecer las denuncias presentadas ante el Parlamento Europeo sobre la existencia de una red de espionaje mundial capaz de entrometerse en los sistemas de comunicaciones europeos con gran facilidad, poniendo en riesgo estrategias políticas y económicas europeas, pero, sobre todo, vulnerando el derecho a la intimidad de los ciudadanos europeos y realizando prácticas comerciales desleales al entrometerse en las comunicaciones de la competencia.
'No hay dudas de su existencia', reza el texto adoptado con el voto favorable de 27 eurodiputados, 5 en contra y 2 abstenciones. El informe revela en sus 120 páginas que EE UU, el Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda se sirven de esta red 'para interceptar comunicaciones privadas y de carácter económico, pero no militares'. La Eurocámara recomienda a las empresas que se doten de los medios de protección necesarios para reducir su vulnerabilidad ante estos sistemas de espionaje. El mensaje a los ciudadanos es que codifiquen su correo electrónico.
