El cardenal de Boston habló en secreto de su dimisión con el Papa
Law descarta abandonar el cargo por los escándalos sexuales de curas de su diócesis
El cardenal de Boston, Bernard Law, responsable de la diócesis más afectada por la ola de escándalos sexuales que ha salpicado las comunidades católicas de Estados Unidos, visitó en secreto al Papa en Roma, para hablar de su posible dimisión. Law sólo hizo pública su visita el pasado martes, dando a entender que no abandonaría su puesto. Los cardenales estadounidenses viajarán al Vaticano la próxima semana, a petición del Pontífice.
'Como resultado de mi visita a Roma, vuelvo a casa animado a seguir liderando la comunidad y garantizar, en la medida de lo humanamente posible, que ningún niño vuelva a sufrir abusos por un cura de esta diócesis', se limitó a decir Law.
Los católicos de EE UU están especialmente descontentos con la actitud de Law y del cardenal de Nueva York, Edward Egan, a los que acusan de haber hecho oídos sordos a los casos de abusos sexuales. Una encuesta publicada ayer por el Boston Globe dice que el 65% de los católicos de Boston piden la dimisión de Law, que lleva en el puesto desde 1984.
El escándalo ha alcanzado graves proporciones: por todo el país han surgido denuncias contra mil sacerdotes por delitos cometidos en los últimos 50 años. El Papa ha llamado a los cardenales estadounidenses al Vaticano la semana que viene.