Noventa países en directo y 3.500 periodistas acreditados
El pontífice que mejor comprendió el poder de transmisión de los medios de comunicación ha tenido un entierro global, retransmitido en directo a millones de fieles de todo el mundo por las televisiones de 90 países. Cadenas por satélite como Al Yazira (con sede en Qatar) y Al Arabiya (Emiratos Árabes Unidos) llevaron las imágenes de la ceremonia hasta millones de hogares en el mundo árabe. Las televisiones de países islámicos como Irak y Jordania, o la de los territorios palestinos, difundieron en directo las exequias de Juan Pablo II. Lo mismo en Israel, el Estado judío por excelencia, a través del canal estatal y de un privado. En Roma, más de un millón de fieles atendieron a la misa funeral (duró dos horas y 30 minutos) a través de las 27 pantallas gigantes instaladas en calles, plazas y estadios.
Más de 3.500 periodistas presenciaron el evento desde el Vaticano, la mayor cifra de informadores acreditados en toda la historia de la Iglesia. Las grandes cadenas de televisión global, como las británicas BBC y SKY News y las estadounidenses CNN y FOX, tenían reservadas terrazas desde hace meses para convertirlas en platós.
