Chávez señala la intención opositora de sacar "ventajas" de la tragedia de Amuay
"Hagan lo que hagan, digan lo que digan, manipulen lo que manipulen, está escrito, les daremos un nocáut fulminante el 7 de octubre", exclamó Chávez al referirse a las elecciones presidenciales en las que se enfrentará al candidato unitario opositor, Henrique Capriles.
El pasado día 25, en horas de la madrugada, una fuga de gas se convirtió en la espoleta para una explosión que dejó en llamas parte de la refinería del Centro de Refinación Paraguaná (CRP), una de los mayores del mundo, con un saldo de al menos 42 fallecidos y que afectó a más de 1.200 viviendas de las zonas aledañas.
Chávez indicó que el fatal evento "ha enlutado y enluta al país" y ratificó la disposición de su Gobierno "a continuar investigando a fondo las causas de esta tragedia y a remediar hasta donde dios permita los daños que ella ha causado".
"Con el dolor a cuestas, sin embargo, nosotros debemos salir siempre fortalecidos", señaló el mandatario.
Chávez lamentó que, sin haber "comenzado a recoger nuestros muertos", la oposición ya "estaba diciendo que la culpa era de Chávez, que la culpa era de Rafael Ramírez (presidente de la estatal Petróleos de Venezuela), que Chávez debía renunciar y, por supuesto, Rafael Ramírez".
"Porque la causa fue por falta de mantenimiento o porque había un escape de gas de hacía varios días que nadie le hizo caso", dijo el mandatario al desestimar esas versiones.
El pasado día 27, Capriles dijo que la explosión en Amuay reflejó "la ineficacia y la politiquería" del Gobierno del presidente Hugo Chávez.
"No estamos hablando de lluvias ni de un evento natural, sino de un accidente que es consecuencia de algo", señaló el candidato opositor.
La Fiscalía General Venezolana ya inició una investigación junto al Cuerpo Técnico de Investigaciones Penales y Criminalísticas (CICPC), la policía de inteligencia Sebin y técnicos de PDVSA para esclarecer los hechos.
