_
_
_
_
_

Un jurado declara inocente a un millonario de Nueva York que descuartizó a su vecino

Los abogados del rico heredero Robert Dust alegaron que su defendido mató a Morris Black por accidente o en defensa propia

Un jurado estadounidense ha declarado inocente a Robert Durst, un millonario heredero de una de las grandes fortunas de Nueva York que confesó haber descuartizado a su vecino, Morris Black, en septiembre de 2001.

En aquella época, Durst, de 60 años, vivía en la ciudad de Galveston, en Texas. Su mujer, Kathleen, había desaparecido en 1982 y las autoridades de Nueva York habían reabierto el caso. En el año 2000, una amiga del millonario, la escritora Susan Berman, tenía previsto comparecer ante los investigadores para aclarar el paradero de Kathleen, pero alguien la mató a tiros antes de que pudiera ofrecer su testimonio.

En el juicio que ha concluido hoy, Durst contó que llegó a Galveston disfrazado de mujer en noviembre de 2000, con peluca y vestido, con la intención de escapar de los periodistas. Allí, según su propio relato, se hizo amigo de Black, ante quien fue descubriendo su verdadera identidad.

Ante el jurado, Durst explicó que el 28 de septiembre de 2001 Black, de 71 años, entró en su apartamento, encontró su pistola y la apuntó contra él con un gesto furioso. Ambos pelearon por la pistola, pero el millonario no recuerda bien lo que pasó. "Yo no maté a mi mejor amigo, pero sí lo descuarticé", afirmó ante el jurado.

La defensa alega que Durst había bebido

La fiscalía acusó a Durst de planificar el asesinato de Black con la intención de usurpar su identidad para escapar a las autoridades de Nueva York, que investigaban la desaparición de Kathleen Durst. Sin embargo, la defensa, que corrió a cargo de algunos de los mejores abogados de Estados Unidos, argumentó que el rico heredero estaba bebido cuando mató a su vecino, por accidente o en defensa propia, después de que ambos lucharan por hacerse con la pistola.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Los abogados de Durst aseguraron además que su defendido descuartizó a Black a causa de una reacción de pánico ocasionada por el alcohol. Posteriormente, el millonario guardó los restos de su vecino en bolsas de basura y los arrojó a la bahía de Galveston. Las bolsas fueron descubiertas dos días después de la muerte de Black. La cabeza todavía no ha aparecido.

Después de escuchar a las dos partes durante seis semanas, el jurado ha acabado declarando inocente a Robert Durst, que se enfrentaba a una pena de hasta 99 años de cárcel, y que ha recibido la noticia de su absolución con gestos de sorpresa y alivio. El hermano de Kathleen Durst, James McCormack, que lleva años cooperando con la Policía para resolver la desaparición de la ex mujer del millonario, ha mostrado su sorpresa por el veredicto. "¿Cómo pueden 12 jurados decir que es inocente después de ver las pruebas?", ha asegurado al periódico The New York Times.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_