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Evo Morales consigue más del 50% de los votos en las presidenciales de Bolivia

Su inmediato rival, Jorge Quiroga, logra el apoyo del 31,5% de los votantes con el 50% escrutado

Los colegios electorales han cerrado hoy en Bolivia tras una jornada tranquila que se ha enturbiado en el último momento por las numerosas quejas de ciudadanos a quienes se les impidió el voto. Los comicios están marcados por la penuria económica, de la que el país no consigue escapar, y por el posible triunfo de Evo Morales, el líder de los sindicatos cocaleros, que ha conseguido convertirse en la gran esperanza de muchos electores desencantados.

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3,6 millones de electores estaban llamados a las urnas para dar su apoyo a alguno de los ocho candidatos, entre los que están Morales y el ex presidente Jorge Quiroga. El actual presidente, Eduardo Rodríguez Veltzé, ha pedido a los candidatos respeto por la decisión de los bolivianos y ha instado a quien resulte perdedor de los comicios a que acepte los resultados.

Poco antes de que cerrara la mayoría de los colegios, el vocal de la Corte Nacional Electoral, Salvador Romero, declaró que los comicios transcurrían "con absoluta normalidad" y con "buena afluencia de electores". Sin embargo, numerosos ciudadanos denunciaron no haber podido votar porque sus nombres estaban mal registrados, simplemente no aparecían o bien habían trasladado las mesas donde votan habitualmente a otros lugares sin previo aviso de las autoridades. Romero ha reconocido que tras las elecciones municipales de 2004, las autoridades excluyeron de las listas a más de un millón de ciudadanos por distintos motivos, como defunciones, abandono del país o por no ejercer su obligación de votar en aquellos comicios. De esta cantidad, según el vocal de la Corte Nacional Electoral, "es imposible saber" cuántos bolivianos no pudieron hoy acudir a las urnas.

El socialista Evo Morales ha confiado en que la votación haya sido "transparente y limpia", pero ha mostrado su preocupación por las quejas de los ciudadanos. Morales ha señalado que esto había ocurrido principalmente en lugares donde el Movimiento Al Socialismo (MAS) tiene presencia mayoritaria y ha anunciado que esta formación política ha recibido denuncias que investigará para determinar si hubo fraude. Por su lado, el Poder Democrático y Social del ex presidente Jorge Quiroga ha denunciado que este fenómeno tuvo un mayor impacto en el departamento oriental de Santa Cruz, su baluarte y escenario de reivindicaciones autonomistas. Según un comunicado de Podemos, "podría tratarse de una maniobra centralista para favorecer al MAS".

Tres presidentes en dos años

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De estos comicios también saldrá el vicepresidente, 130 diputados, 27 senadores y, por primera vez, los prefectos (gobernadores) de los nueve departamentos. Las elecciones son el resultado de movilizaciones de diferentes organizaciones sociales a través de protestas y bloqueos, que en octubre de 2003 obligaron a dimitir al ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, que fue sucedido por Carlos Mesa. El pasado junio, Mesa renunció a su vez al cargo.

Eduardo Rodríguez asumió entonces el poder, en medio de la convulsión social, con el único objetivo de convocar los comicios de hoy, y entregar el poder el próximo 22 de enero, cuando tome posesión el presidente que salga hoy elegido. El propio Rodríguez estuvo a las puertas de renunciar si se postergaban las elecciones, previstas en un primer momento para el 4 de diciembre, por un fallo del Tribunal Constitucional que anuló el artículo 88 del Código Electoral y puso en riesgo los comicios, por el enfrentamiento entre regiones por la redistribución de escaños.

La misión de observadores enviada por la Organización de Estados Americanos (OEA) a las elecciones generales que celebra hoy Bolivia ha constadado que el ambiente preelectoral que se vive en el país es "tranquilo, pacífico y positivo". La misión de observadores se compone por más de 200 personas, procedentes de 24 países de la región, y sus representantes han manifestado su "profunda satisfacción" por la forma con la que el país y sus instituciones están encarando el proceso electoral.

Un minero boliviano pasa por delante de una pintada de apoyo a Evo Morales, cerca de Potosí.
Un minero boliviano pasa por delante de una pintada de apoyo a Evo Morales, cerca de Potosí.REUTERS

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