Los pilotos argentinos denuncian que dos aviones comerciales estuvieron a punto de chocar en pleno vuelo

La guerra de los radares entre pilotos, controladores y el Ejecutivo de Kirchner ha entrado en su punto álgido. La Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) de Argentina ha denunciado que dos aviones estuvieron ayer a punto de colisionar en pleno vuelo. El hecho fue confirmado por la Asociación de Controladores de Vuelo, cuyo titular, César Salas, relató que los aviones estuvieron a punto de chocar cuando volaban "en el límite" entre las provincias de Buenos Aires y Córdoba (centro del país). Sin embargo, el Gobierno aseguró que la aviación comercial opera en el país en condiciones "adecuadas" de seguridad y negó el incidente, al igual que el Ejército.

El impacto se evitó porque una de las aeronaves involucradas activó "un equipo que los aviones tienen a bordo para evitar colisiones", aseguró el secretario de APLA, Pablo Biró. Según esta versión, el suceso ocurrido involucró a un avión de la compañía estadounidense United Airlines y uno de la aerolínea de vuelos locales Andes.

De confirmarse la denuncia de pilotos y controladores, se trataría del segundo incidente de estas características que se registra en las últimas semanas, ya que el pasado 22 de abril un avión comercial de Aerolíneas Argentinas estuvo cerca de colisionar en el aire con una nave privada que presuntamente no iba a la altura correcta.

El radar dañado

Según los controladores, el avión de Andes, un MD 80, tuvo que bajar 2.000 pies al estar en la misma línea de 35.000 pies que un avión de United, un Boeing 777, a una distancia de unos 20 kilómetros. Además, el sector denuncia la existencia de estos fallos debido a la deficiente cobertura del radar que controla las operaciones aéreas de los dos aeropuertos más importantes de Argentina, que fue dañado por un rayo durante una tormenta que se registró el 1 de marzo pasado.

Pocas horas antes del hecho, la ministra de Defensa, Nilda Garré, afirmó que "no hay que entrar en una prédica apocalíptica" y dijo que según los principales organismos internacionales de control las condiciones de seguridad para la aviación comercial en el país "son adecuadas". Garré también anunció que es "inminente la llegada de un radar secundario en condición de préstamo por parte de España", y ratificó que antes de fin de año se incorporarán otros cuatro radares a los cinco existentes. El presidente argentino, Néstor Kirchner, ordenó la compra de quince radares tras reconocer que "la estructura aérea está quebrada" y ordenó desvincular a la Fuerza Aérea del control de la aviación civil.

La semana pasada la Federación Internacional de Asociaciones de Pilotos de Líneas Aéreas (IFALPA) recomendó a los comandantes de aeronaves "extremar las medidas de vigilancia y precaución" en el país suramericano.