_
_
_
_
_

El largo camino hacia el poder de Li Keqiang

El viceprimer ministro chino se convertirá en 2013, si se cumple el guión, en primer ministro de la segunda potencia del mundo

Li Keqiang, viceprimer ministro de China, ha labrado su trayectoria a lo largo de una carrera política que ha recorrido en buena parte en contacto con el actual presidente, Hu Jintao. El dirigente ocupa el puesto número siete de la jerarquía china en el Comité Permanente del Politburó -el órgano de más alto poder del país asiático, compuesto por nueve miembros-, y, si se cumple el guión, se convertirá en marzo de 2013 en primer ministro de la segunda potencia económica del mundo, en sustitución de Wen Jiabao. Culminará entonces el ascenso de la quinta generación de líderes chinos, a cuya cabeza como secretario general del Partido Comunista Chino (PCCh) y presidente del país se prevé que esté el actual vicepresidente, Xi Jinping.

Más información
China firma contratos por 5.650 millones de euros en sectores clave de la economía española
Trabajemos de la mano
Li Keqiang firmará en España contratos millonarios

Li, de 55 años, es el miembro más joven del Comité Permanente y en su calidad de lugarteniente de Wen Jiabao tiene responsabilidades esencialmente en el campo económico; entre otras, las finanzas, la energía, el desarrollo, la gestión macroeconómica, el control de los precios y la seguridad alimentaria.

Nació en Dingyuan (provincia de Anhui) en el seno de una familia humilde. Su padre era un funcionario local de bajo rango. Durante la Revolución Cultural (1966-1976), fue enviado a trabajar al campo, en el condado de Fengyang (Anhui). Allí, se unió al PCCh y fue nombrado secretario del partido de su comuna. En 1978, entró en la prestigiosa Universidad de Pekín (Beida), donde estudió Derecho. Era conocido por su disciplina, y algunos compañeros recuerdan que memorizaba vocabulario de inglés mientras hacía cola en el comedor para almorzar. Tras licenciarse, ocupó cargos de alta responsabilidad en la Liga de la Juventud Comunista, donde fue acólito de Hu Jintao, y estudió en la escuela del partido.

Cuando estallaron las protestas a favor de la democracia de Tiananmen, en 1989, tomó parte en las reuniones para reconciliar posturas con los estudiantes. Pero cuando fue declarada la ley marcial, dejó de lado cualquier simpatía que pudo haber sentido por el movimiento.

Desarrollo y represión

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Tras obtener un doctorado en Economía en la Universidad de Pekín, en 1998 fue nombrado vicegobernador de la provincia de Henan, aunque actuó como gobernador en funciones, cargo que asumió oficialmente el año siguiente. En 2002, fue designado secretario provincial del PCCh. En Henan, impulsó el desarrollo de la que es una de las regiones más pobres y pobladas de China, pero también reprimió los movimientos cristianos clandestinos y fue testigo del escándalo de las infecciones masivas de sida entre los campesinos por la venta de sangre. En 2004, se trasladó a la provincia norteña de Liaoning como secretario del partido hasta que, en octubre de 2007, entró en el Comité Permanente del Politburó durante el XVII Congreso del PCCh.

Considerado durante algún tiempo posible sucesor de Hu Jintao, parece haber perdido la batalla política por el liderazgo máximo del país en beneficio de Xi Jinping, a pesar de que mantiene una amistad de décadas con el actual presidente. A cambio, será previsiblemente primer ministro. Los tiempos de personalismo, culto al dirigente e imposiciones unitarias de líderes como hicieron Mao Zedong y Deng Xiaoping han quedado atrás, y en el PCCh actualmente las decisiones son colegiadas y fruto de un delicado equilibrio de poderes.

Li Keqiang es considerado un hombre ambicioso, franco y de lengua afilada. Ha defendido con entusiasmo el concepto de Hu de creación de una 'sociedad armoniosa' y la necesidad de bascular hacia un modelo económico más basado en el consumo interno y menos en las exportaciones y la inversión, en el que el proceso de urbanización es crucial. También ha hablado sobre la necesidad de facilitar el acceso a la vivienda y un cuidado sanitario asequibles. Su primera gran comparecencia internacional fue en el Foro de Davos del año pasado. Su gira europea, iniciada en España, de alto contenido económico, forma parte del largo camino de preparación y ascenso al poder que tradicionalmente siguen los líderes chinos.

Debate en Eskup sobre los retos de China para el siglo XXI

Li Keqiang, viceprimer ministro de China, durante su visita a España.
Li Keqiang, viceprimer ministro de China, durante su visita a España.REUTERS

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_