_
_
_
_
_

Los combates en Libia dejan 18 muertos en las últimas horas

Los rebeldes anuncian que se han quedado sin dinero y tachan de "fracaso" la colaboración con los gobiernos occidentales

Al menos 18 rebeldes han perdido la vida en los combates desencadenados en las últimas horas entre la insurgencia y las fuerzas leales al coronel Gadafi, cerca de la ciudad de Misrata, 200 kilómetros al este de Trípoli, y también en Nalout, informaron hoy las cadenas de televisión árabes.

Las fuentes señalaron que en Misrata los enfrentamentos tuvieron lugar cerca de El Krarem, donde hubo 10 muertos y cerca de medio centenar de heridos entre los insurgentes. También ayer viernes, 10 civiles murieron y alrededor de 40 fueron heridos como consecuencia de los bombardeos con misiles Grad efectuados por las fuerzas gadafistas contra la misma ciudad.

En Nalout, al sudoeste de Trípoli, cerca de las fronteras con Túnez, otros ocho rebeldes murieron tras violentos combates con las fuerzas fieles a Gadafi, dijeron las mismas fuentes.

Más información
La OTAN reconoce haber matado a civiles en Libia

Por otra parte, la agencia de prensa oficial libia Jana, que cita fuentes militares, anunció hoy que los aviones de combate de la OTAN han llevado a cabo dos incursiones en la mañana de hoy, en la zona de El Krama, en la periferia de Trípoli, pero sin que hasta ahora se hayan podido contabilizar las eventuales pérdidas de vidas humanas.

Los rebeldes, sin dinero

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

El ministro rebelde para el Petróleo, Alí Tarhuni, ha anunciado hoy que el Consejo Nacional de Transición libio ya no tiene dinero en efectivo por culpa de la política de colaboración con los gobiernos aliados, que tachó de "completo fracaso", y que ha llevado a la paralización de la industria petrolera en poder de los insurgentes, quienes han decidido negociar el desarrollo de la misma con compañías privadas.

"No tenemos dinero en efectivo y nos estamos quedando sin nada", lamentó Tarhuni. "Es un fracaso total y las naciones occidentales, o no lo entienden, o no les importa". El ministro explicó que los daños causados por los combates en las refinerías de su bastión en Benghazi impiden la producción de petróleo, "y nadie espera que se el suministro se reanude a corto plazo".

Por ello, Tarhuni ha informado de que el Gobierno rebelde ya ha comenzado a hablar directamente con compañías extranjeras sobre proyectos de cooperación futuros y aseguró que no tiene problema alguno con dialogar siquiera con aquellas empresas que colaboraron con su enemigo declarado, el líder libio Muamar Gadafi.

Tarhuni reveló que entre las compañías consultadas se encuentran la alemana Wintershall y la francesa Total. "Necesitamos ayuda", indicó Tarhuni, quien se comprometió a respetar "todos los acuerdos que sean necesarios". "Nuestros únicos enemigos son Gadafi, sus asesinos y sus matones", aseguró. "En lo que se refiere al negocio, no tengo enemigos".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_