La Cámara italiana autoriza el ingreso en prisión de un diputado de la mayoría

La Cámara del Parlamento italiano ha aprobado hoy por 319 votos favorables y 298 contrarios la prisión preventiva para el diputado del Pueblo de la Libertad Alfonso Papa, un ex magistrado napolitano acusado por los jueces de media docena de delitos dentro del caso llamado P4. El escándalo hace referencia a una presunta asociación secreta, cercana a la presidencia del Gobierno, que obtenía y comunicaba noticias relativas a investigaciones judiciales. El significado político es una nueva derrota política de Berlusconi, ya que los diputados de la Liga Norte han votado a favor del arresto junto a la oposición.

Las huestes de Umberto Bossi se han desmarcado así de la estrategia contraria a la detención definida el primer ministro, Silvio Berlusconi, quien ha acudido a la Cámara a votar, ha aplaudido el discurso del diputado imputado, y ha declarado: "Es una vergüenza, Italia se arriesga a sufrir una escalada de detenciones de políticos como la que vivió en 1992", el año que estalló Tangentopolis.

El voto en contra de la Liga complica un poco más la precaria situación política de Berlusconi. Por un lado significa que su aliado del norte es más sensible que el primer ministro al clima social, cada vez más marcado por la indignación contra los privilegios, legales y económicos, de la clase política. Por otro, acentúa la división de la coalición de Gobierno en una fase económica muy delicada, ya que en los últimos días la Liga ha votado en el Parlamento contra el Gobierno del que forma parte al menos en cuatro ocasiones.

La decisión de la Liga, tomada por Umberto Bossi tras muchas dudas y cambios de posición, revela además la debilidad interna del líder del grupo autonomista, ya que un amplio grupo de diputados del Carroccio ha decidido seguir las indicaciones del ministro del Interior, Roberto Maroni, quien a su vez cada día parece más alejado tanto de Bossi como de Berlusconi. De hecho, Bossi se ha ausentado de la Cámara durante el debate, y al final ha sido Maroni quien ha hablado con la prensa: "Hemos sido coherentes", ha dicho.

Alfonso Papa ha tomado la palabra antes del voto final y, con voz serena, ha revelado que ha vivido seis meses de calvario, pero que solo se encuentra turbado, ha dicho, por haber tenido que contarles a sus hijos de diez y doce años que "podría no pasar en casa" este fin de semana.

La decisión favorable al arresto ha sido secreta por voluntad del Pueblo de la Libertad, que confiaba en que algunos diputados de la Liga y de la oposición aprovechasen el anonimato para salvar a Papa de la detención. Cuando el presidente de la Cámara, Gianfranco Fini, ha anunciado el resultado, todos han guardado un silencio sepulcral.

Mientras tanto, el Senado ha rechazado en medio de una enorme bronca la petición judicial de arresto domiciliario contra el diputado del Partido Democrático Alberto Tedesco, acusado de corrupción por los jueces de Bari en un caso sobre la Sanidad pública de Apulia. La votación se ha resuelto, paradójicamente, con los votos en contra del Pueblo de la Libertad y los votos a favor del PD: 151 noes, 127 síes y 11 abstenciones. El propio Tedesco había pedido al Senado que concediese su arresto. Tras el resultado ha habido empujones, gritos e insultos en la sala del Trasatlántico. Domenico Gramazio (PDL) ha dicho a Paolo Giaretta (PD): "Qué vergüenza, 24 de vosotros habéis votado contra el arresto". Y ambos se han enzarzado en una pelea.