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Reanudado el tráfico aéreo en Buenos Aires al disiparse las cenizas volcánicas

Las emisiones del volcán chileno Puyehue afectan gravemente el tráfico aéreo en las terminales Aeroparque y Ezeiza de Buenos Aires

La nube de ceniza volcánica cubre el cielo de Buenos Aires.
La nube de ceniza volcánica cubre el cielo de Buenos Aires.Los La Valle (Efe)

Las operaciones de aviación comercial en Buenos Aires han comenzado a restablecerse en forma paulatina en Aeroparque (cabotaje y limítrofes) y Ezeiza (internacional) al disiparse la ceniza del volcán chileno Puyehue. "Ya no tenemos cenizas. La situación meteorológica mejoró y no hay partículas en superficie. Hubo aterrizajes y despegues, pero algunas aerolíneas mantienen las cancelaciones", afirmó una fuente que pidió reserva de identidad de la firma concesionaria Aeropuertos 2000 a France Presse.

Una nube de cenizas volcánicas procedente del Puyehue envolvió ayer Buenos Aires y forzó la cancelación de al menos 150 de vuelos. El aeropuerto de la capital desde donde se realizan los vuelos locales, Aeroparque, cerró ayer desde el mediodía y en la terminal Internacional de Ezeiza también hubo que cancelar ayer muchos vuelos. Al menos 12.000 pasajeros se quedaron en tierra por las cancelaciones tan solo en Aeroparque.

El Puyehue entró en erupción a comienzos de junio pasado y la nube de cenizas afectó con dureza a localidades del otro lado de la Cordillera de Los Andes, en el sudoeste argentino, además de alterar reiteradas veces desde entonces la actividad aerocomercial en Sudamérica y Oceanía. "Ahora son las compañías las que van definiendo si vuelan o no", agregó la fuente.

El fenómeno de las cenizas volvió el sábado pasado a raíz de un temporal con fuertes vientos en el sudoeste argentino que arrastraron las partículas con dirección noreste. La zona turística de Bariloche, en Argentina, viene sufriendo las consecuencias desde entonces y ayer se volvió a anunciar el cierre del aeropuerto local, al menos hasta diciembre próximo.

Buenos Aires, situada a más de 1.600 kilómetros, ha notado la presencia de nubes de ceniza en varias ocasiones, pero la actual oleado ha sido especialmente fuerte. El sol luce cubierto por una fina capa de polvo y toda la ciudad ha adquirido un tono gris. Algunos centros médicos han emitido avisos para desaconsejar el ejercicio físico al aire libre hasta que aparezcan corrientes de aire que alejen la nube de la ciudad. Igualmente se recomienda conducir con precaución.

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