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España es partidaria de avanzar en el euro sin dejar a ningún país atrás

Madrid no ha sido informado formalmente de las conversaciones Berlín-París

El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso.
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso. Markus Schreiber (AP)

“España es partidaria de avanzar tan rápido y tan lejos como se pueda en la integración europea, pero con la condición de que no se deje a nadie atrás”. Esta es la posición del Gobierno español ante los noticias, cada vez más insistentes, de que Francia y Alemania negocian un acuerdo para dar un salto en la integración y crear un “núcleo duro” del euro, una Europa a dos velocidades en la gobernanza económica y financiera.

Madrid no ha sido informada formalmente del contenido de las negociaciones, pero sigue con interés las ideas que se intercambian entre París y Berlín, tanto desde círculos gubernamentales como en think tanks o grupos de opinión. “Hace meses que vienen repitiendo que los que estén preparados para avanzar deben hacerlo”, explican las fuentes consultadas.

El Gobierno español atribuye la iniciativa a la frustración de Francia y Alemania por la lentitud en el proceso de toma de decisiones de la UE, que se ha puesto dramáticamente en evidencia en la actual crisis de la deuda soberana, y cree que puede tener efectos positivos si sirve como acicate a los países más remisos a dar nuevos pasos hacia una verdadera gobernanza económica de la UE. “Es un mensaje para quienes ponen palos en las ruedas. Decirles que si no se puede avanzar todos juntos,se hará sin ellos”.

No está claro, sin embargo, según las mismas fuentes, si Francia y Alemania quieren avanzar dentro de la Unión, contando con la Comisión Europea y con el visto bueno de los de más socios, o, lo que parece más probable, situarse al margen de la misma, mediante un acuerdo intergubernamental que podría incluir, entre otros aspectos, la creación de un Ministerio de Finanzas común, la lectura conjunta de los presupuestos o la armonización fiscal. Y entiende que este proyecto suscite recelos en los países que no están preparados para avanzar con tanta rapidez y temen quedarse descolgados.

“No existe ningún mecanismo jurídico para salir del euro y mucho menos para expulsar a un país de él", explican fuentes gubernamentales

Lo que sí descartan fuentes gubernamentales españolas es que el proyecto franco-alemán, aún en fase embrionaria, pueda conducir a medio plazo a la salida del euro de los socios que no le acompañen por este camino. “No existe ningún mecanismo jurídico para salir del euro y mucho menos para expulsar a un país en contra de su voluntad. Además, no tendría sentido hacerlo después de todo el esfuerzo que se está haciendo para evitar la ruptura de la zona euro”, advierten.

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Por eso, las fuentes consultadas estiman que, en este momento, “lo prioritario y urgente es solucionar el problema de la deuda griega y recuperar la estabilidad de Italia, para evitar los sobresaltos en los mercados y los efectos sobre los demás”, agregan, en alusión a la escalada de la prima de riesgo de los bonos españoles. “Lo demás, por ahora, no son más que especulaciones”, remachan.

El Gobierno español confía en que la cumbre europea de diciembre, en el que el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, debe presentar la hoja de ruta de la gobernanza económica, sirva para despejar definitivamente el clima de incertidumbre y devolver la confianza a los mercados en la UE. Y no solo en Alemania y Francia.

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Sobre la firma

Miguel González
Responsable de la información sobre diplomacia y política de defensa, Casa del Rey y Vox en EL PAÍS. Licenciado en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) en 1982. Trabajó también en El Noticiero Universal, La Vanguardia y El Periódico de Cataluña. Experto en aprender.

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