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GUERRA CIVIL EN SIRIA

El régimen sirio mantiene cerrado a cal y canto el barrio de Bab Amro

La Cruz Roja logra repartir comida, mantas y medicinas a desplazados de Homs

Un hombre lleva a un niño en brazos en Homs en una imagen sin fecha.
Un hombre lleva a un niño en brazos en Homs en una imagen sin fecha.AFP

Las autoridades sirias mantienen cerrado a cal y canto el acceso del Comité Internacional de la Cruz Roja (ICRC, en sus siglas en inglés) al barrio de Bab Amro, corazón de la revuelta en Homs y objetivo de la represión del régimen de Bachar el Asad. Un grupo de la ICRC ha logrado llegar a dos distritos de Homs –Al Inshaat, muy cerca de Bab Amro, y Al Tawzii– y ha distribuido comida y mantas a la población civil, incluidas algunas familias que habían huido del barrio bastión de los rebeldes, según ha confirmado a Reuters un portavoz de la organización. 

Las fuerzas de seguridad sirias controlan ya Homs y el barrio rebelde de Bab Amro tras un asedio de casi 30 días y un número de bajas entre la población civil aún por cifrar. La Cruz Roja ha logrado entrar en Homs para distribuir material de emergencia.

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Los activistas que trabajan en el terreno para denunciar la represión del régimen aseguran que el Gobierno de Damasco pretende cerrar Bab Amro al paso del ICRC para que no haya testigos de las "masacres". El relato de los últimos periodistas occidentales que han estado en el barrio de Homs describe un infierno de casas derruidas por los bombardeos, calles salpicadas de ruinas y heladas por la nieve y las bajas temperaturas nocturnas y una población sin alimentos ni medicinas. Los testimonios recogidos este lunes por el corresponsal de la BBC en la zona relatan el horror de la ofensiva del Ejército en los últimos días. "A mi hijo le cortaron el cuello", dijo una mujer que consiguió escapar de Bab Amro tras andar a pie durante tres días. Según su testimonio el viernes las tropas del Ejércitos ejecutaron a 36 hombres y chicos. 

Y mientras se aproxima el primer aniversario del comienzo de las protestas contra el régimen de Bachar el Asad,el Ejército sirio ha vuelto a cercar este lunes Deraa, la ciudad donde empezaron las manifestaciones antigubernamentales. Según ha declarado un residente a Reuters, centenares de miembros de las fuerzas de seguridad se han desplegado en la ciudad tras una noche de enfrentamientos con miembros del Ejército Libre de Siria. Ha habido al menos un muerto.

Grupos de la oposición han informado en las últimas horas de que facciones del Ejército Sirio Libre, formado por militares desertores, lograron atacar a las fuerzas regulares del régimen en varios puntos de Deraa, cerca de la frontera con Jordania. "Los tanques responden disparando con armamento antiaéreo contra barrios de la ciudad y francotiradores del Ejército están tirando a todo lo que se mueve, incluso a bolsas de nailon", ha señalado Maher Abdelhaq, uno de los activistas. Esta información no ha podido ser contrastada por fuentes independientes.

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Casi un año después del inicio del alzamiento contra El Asad, la ONU calcula que la cifra de muertos supera con creces los 7.500, con un centenar de víctimas diarias desde que comenzó el año.

En el frente diplomático, tras el llamamiento de China para que cese la violencia y el compromiso de mandar un enviado al país, este lunes la Liga Árabe ha anunciado que el Gobierno sirio recibirá el próximo sábado a Kofi Annan. El exsecretario general de la ONU fue nombrado enviado especial para Siria por Naciones Unidas y la Liga Arabe el pasado 23 de febrero y esta será la primera visita que realice a Siria. Damasco había indicado la semana pasada que había solicitado aclaraciones sobre su misión.

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