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Aznar internacional

Lluís Bassets

La publicación de las memorias de los políticos españoles suelen ser acontecimientos grises y menores, en buena sintonía con su escasa calidad y su interés público limitado o nulo. Solo recuerdo las muy breves de Leopoldo Calvo-Sotelo como un ejercicio intelectual de valor, entre otras razones por la ironía y la sutilidad de su autor.

Acabo de leer el primer volumen de las que ha escrito, o le han escrito, a José María Aznar, que abarca o data desde su nacimiento en 1953 hasta 1999, cuando termina su primera legislatura. Son poco más de 300 páginas, pulcramente organizadas y escritas, fruto de la extraordinaria profesionalidad de los editores de Planeta, que se han visto precisados a añadir en anexo unos discursos para engordarlas y dar así con un volumen de suficiente prestancia.

El historiador Julián Casanova ya ha señalado que "nada relevante se aprende en ellas sobre la transición o de cómo se construyó la democracia". Y que su mayor sustancia está en que "el lector puede constatar, sin embargo, una y otra vez, de qué está hecha la política: de amigos, fidelidades y favores, que se devuelven según lo recibido".

En el período abarcado por este primer volumen hay varios episodios que merecerían un mejor, más extenso y en todo caso detallado tratamiento. Uno de ellos es la reforma promovida por Aznar de la Internacional Demócrata Cristiana, convertida en Internacional Demócrata de Centro, junto al ingreso del Polo de la Libertad de Berlusconi; toda una operación que, a la vista está, merecería algún tipo de reflexión crítica, o al menos analítica. La llegada del aznarismo al Partido Popular Europeo y a la IDC introdujo un facto de dureza liberal y de populismo conservador en la derecha global que pasa totalmente desapercibido, ni siquiera como mérito, en las memorias.

Algo más de espacio, aunque no energías, dedica a su experiencia en Bruselas como recién incorporado a la gimnasia de los consejos y cumbres, pero solo lo hace para documentar su clarividencia y su acierto en las decisiones sobre la incorporación en el euro. En estos cuatro años sucedieron suficientes cosas en la escena internacional como para suscitar la atención del jefe de Gobierno de un país de intensa proyección exterior en aquel momento. Sucedieron en Oriente Próximo, en los Balcanes o en Irlanda del Norte, pero para Aznar todo lo que cuenta pasa entre Madrid y Valladolid.

Aznar coincidió en sus primeros cuatro años con Bill Clinton, Tony Blair, Helmut Kohl, Jacques Chirac, y ya había conocido, según se encarga de subrayar, a muchos otros, como Margaret Thatcher, Giulio Andreotti, Carlos Menem o John Major. Pues bien, estos nombres solo le sirven para su 'name droping', como adorno a sus decisiones y peripecias (Clinton, Blair y Chirac se sorprenden de que no quiera presentarse por tercera vez), pero en ningún caso para explicaciones sobre su carácter, sus conversaciones y relaciones, y mucho menos para dar alguna visión personal del panorama mundial y de sus problemas.

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La pasión política de Aznar, que la hay, es localista y sin horizontes. Inspirada, eso sí, por una idea tan grandiosa como indefinida de España y de su lugar en el mundo, y por una identidad española recia y compacta (por eso no necesita definición), quizás inquietante y que probablemente merece un desarrollo específico. Como nada nos dice de sus ideas juveniles, aparentemente falangistas, nada podemos saber de las raíces de su españolismo en el pasado inmediato.

Para la memoria selectiva de Aznar, en su biografía no tiene papel alguno el franquismo y por eso calla. O quizás es exactamente por lo contrario. Si se atreviera a escribir sobre todo esto y a contar lo que vivió y lo que ahora piensa de todo ello, seguro que triunfaría como memorialista.

Comentarios

En fin, un libro tóxico a evitar. Y por lo demás, en el anexo seguramente no ha incluido sus primeras incursiones discursivas en forma de artículos preconstitucionales en el diario La Rioja.
Un libro vacío propio de un hombre vacío con medalla del Congreso estadounidense. No le preocupa tanto la medalla por lo que significa como por lo que luce en el pecho. Y así con todo, parece. Este análisis confirma mi idea de que nuestro ex presidente es un hombre tan gris y mediocre como sus memorias. Por que a ver si va a resultar que aunque haya que respetar a nuestros ex presidentes vamos a tener que considerarlos superhombres cuando son justamente lo contrario.
Creo sin duda que Aznar ha sido un hombre muy importante para este país, sin entrar a valoraciones personales o partidistas, y creo realmente que mejora lo tenemos hoy día con cres suficientes como para acordarnos de él
Un libro para darse pisto entre los incondicionales y de paso hacer caja. Qué poco disimula este hombre su amor al dinero. Puede decirse que su libro aporta poco al análisis de la historia de España, siquiera de la que le tocó vivir de cerca en el máximo nivel. Lo mismo que las citas de nombres son para llenar su 'agenda de importancia', no hay reflexiones, solo peripecias y anécdotas con la insipidez como principal ingrediente.
http://www.losgenoveses.net/Personajes%20Populares/aznar/articuloslarioja/sietearticulos.htm
Cualquier tiempo pasado fue mejor pero no cualquier tipo pasado lo fue. Rememoremos un poco la singladura política de Aznar. Aznar abandonó el villorio para conquistar la gran ciudad. Entró en 1996 por la puerta chica, por un puñado de votos, revalidó su apuesta con un triunfo abrumador, y acabó saliendo en 2004 por la puerta grande, pero grande al revés, tan grande como la mentira que le encumbró a las mayores cimas de cinismo político que se conozcan. Porque si bien es verdad que quien se presentaba aquel año del 11-M era Rajoy, no lo es menos que se votó en clave Aznar. Pesó más el causante que el heredero. Y de entonces acá, y tras sacarnos del rincón de la historia, sigue ladrando su rencor por las esquinas, cuando le dejan. Puede que Aznar esté considerado por algunos como el mejor presidente de España, pero es mentira. Aznar es el autor intelectual, uno de ellos, por acción y por omisión, del fiasco actual, por más que traten de culpar en exclusiva al que le explotó la bomba, que si de algo se le puede acusar es de no saber desactivarla. Y esa es un poco mi visión de este personaje, al que confío que la historia y el tiempo ajusticie como corresponde.
Todos los politicos, sobre todo los que han ejercido una parcela de poder(desde presidente hasta gerente de empresa estatal), tienen la necesidad de justificarse, asi hayan hecho bien las cosas, dentro de lo que cabe(no hay cargos omnipotentes), por eso sus declaraciones a posteriori, sean en las entrevistas o en sus escritos, tienden a la fabula, al heroismo, del esfuerzo sobrehumano para hacer lo que hicieron(hasta lo que dejaron de hacer, y culpan al sucesor de no hacerlo), sus virtudes son de anacoreta, etc.; cuando escriben(o les dan haciendo), prima el dislate, los vacios, recurren al chisme y alusiones oscuras, copian textos ajenos(a veces fuera de contexto y del tiempo); eso si "lanzan" sus obras en actos dignos de la farandula(con esos personajes) mas vulgar, llena de lambones.
Y no me tenga en cuenta el autor del blog los excesos cometidos, en especial los que tratan de enmendar la plana. Y feliz 2013, por más que suene a oxímoron económico, como acabo de leer en un tuit.
Y por lo demás, ¿ha conseguido ya el titulo nobiliario o sigue dando la chapa al Rey para que le haga duque? Si es que lo ya lo digo, todo es apariencia y prepotencia, potenciar la primera para dar rienda suelta a la segunda.
Empezamos un Nuevo Año y por aquello de año nuevo, vida,nueva, esperemos de los políticos rectificación en las prioridades, que rectificar, dicen es de sabios. Ojalá sean capaces de ver que en un mundo globalizado no sirven viejas recetas, pensadas para comportamientos estancos. El sistema, basado, nos guste o no, en el consumo, se esclerotiza cuando las medidas que se toman van contra su propia esencia. De persistir en las políticas de recortes, sin fomento del crecimiento terminaran con tal parálisis del mismo que provocaran un caos traumático de incalculables consecuencias. Los intereses de unos pocos no pueden llevar a la desesperación de la mayoría de una población que, independientemente de su posicionamiento político personal, ve con cada vez mayor estupor como el deterioro de metas, conseguidas con mucho esfuerzo, son pisoteadas de forma regresiva y despiadada. Este modesto blog, iniciado hace un mes, intenta humildemente aportar otra visión del problema, cierra el año con 25.000 visitas, gracias por la paciencia en leerme. Estamos, aún, a tiempo de tener un FELIZ AÑO 2013. http://fraesma.blogspot.com
Poco puede decir sobre sus vivencias fuera de España cuanimado por aquel entonces no sabía inglés. En su favor está el haber cogido un mínimo nivel en los últimos años. Lastima que no hubiera empezado antes.
Me gustaría saber cuántos de quienes realmente importan tienen en su agenda al ex presidente Aznar, o simplemente le descuelgan el teléfono, caso de que se atreva a llamar. Seguro que a González sí se lo descuelgan más de cien. Lo digo porque ya podría, en tal caso, nuestro ex presidente tirar de agenda como quien tira de talonario para llamar a la Canciller, o alguien de la CDU, Schäuble, con el que seguro coincidió, y pedirle que deje de apretarnos las tuercas.
Porque no todo tiene que ser chupar y chupar en vacío, digo yo.
Creo que la definicion de pais es injusta y errónea -Este es un país pequeño y mediocre, provinciano y funcionarial y, en el fondo, insignificante, tal como lo revela y trasluce en cada uno de los episodios de este repaso autobiográfico- aplicada a España pero muy acertada si la reduces a la derecha española, que tiene todas esas características. En la medida en que la derecha ha ido asumiendo mas poder, el pais se ha ido transformando en su retrato. El de la transición, controlado por la izquierda y por las derechas modernas (nacionalistas, ucd y el sector centrista del PP) fue otra cosa. Se convirtió en un pais en ebullición, una potencia cultural y tuvo una proyección política en Europa y el mundo muy superior a su importancia relativa. Luego gano la facción zafia, casposa, inculta y reaccionaria de la derecha, los falangistas y franquistas del PP como Aznar, Rajoy (que entro en política en el partido del muy fascista Gonzalo Fernández de la Mora, contrario a la Constitución), Rato, Fraga, Isabel Tocino, Mayor Oreja, Federico Trillo, Ruiz Gallardón, etc. Si UCD hubiese resistido y hubiese impuesto su modelo de derecha moderna y democrática, este sería hoy otro pais.
Tiene razón Marc, separemos la España de derechas de toda la vida de Dios, que responde a esos calificativos (en lo que de despectivos les toque, que no es todo, salvo el de mediocre), de la España trabajadora y luchadora que soporta a la primera, también de toda la vida de Dios.
con referencia al comentario de MARC: totalmente de acuerdo con tu síntesis. y así nos está yendo. y de acuerdo con la definición que hace CIRO: libro tóxico a evitar.
Prefiero la pornografía. Gracias.
Asnar es un simple payaso de la política. Su fracaso se agudizó con el pacio diabólico de las Azores (con los impresentables Bush y Blair) que provocó el genocidio contra el pueblo de Irak. Estoy de acuerdo con Ciro de que Asnar es un hombre vacío, gris y mediocre.

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Sobre la firma

Lluís Bassets
Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).

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