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Obama intensifica su campaña a favor del control de las armas de fuego

El presidente de EE UU presiona al Congreso para que apruebe una legislación más restrictiva: "No podemos esperar a un nuevo Newtown".

Eva Saiz
El presidente de EE UU durante su discurso en Minneapolis.
El presidente de EE UU durante su discurso en Minneapolis.BRENDAN SMIALOWSKI (AFP)

El presidente de Estados Unidos ha insistido este lunes en Minneapolis en la necesidad de que el Congreso apruebe una ley que incremente el control sobre las armas de fuego. Pero en lugar de apelar directamente a los responsables políticos, Barack Obama ha instado a los ciudadanos a que sean ellos quienes les presionen para que adopten cuanto antes medidas concretas.

“Decidles [a los miembros del Congreso] que ya es hora de que actúen, que no podemos esperar a un nuevo Newtown”, ha dicho Obama durante su discurso en la sede del Centro de Operaciones Especiales del Departamento de Policía de Minneapolis. "Solo podremos reducir la violencia derivada de las armas en este país si el pueblo americano decide que esto es algo importante”, ha insistido.

No tenemos que estar de acuerdo en todo para estar de acuerdo en que algo hay que hacer. Es nuestra responsabilidad como americanos y es por lo que yo voy a pelear mientras siga siendo vuestro presidente” Barack Obama

Es la primera vez, desde que presentara su plan para el control de armas a principios de enero, que el presidente defiende su iniciativa fuera de Washington. Con este viaje, el mandatario pretende recabar el apoyo popular para su ambiciosa iniciativa que ha sido recibida con cierta reticencia por la mayoría de los miembros del Capitolio, entre ellos varios demócratas.

Obama ha presentado sus medidas, entre ellas la venta de rifles de asaltos y de cargadores de más de 10 balas y la extensión de la revisión de antecedentes a todas las transacciones de armas, no como "propuestas de derechas o de izquierdas, sino como iniciativas de sentido común”. Aunque ya ha firmado varias órdenes ejecutivas para comenzar a poner en práctica varios de los puntos de su plan, para las tres medidas sobre los que ha hecho hincapié, necesita contar con una ley del Congreso, muy dividido en cuanto a la viabilidad. “El Senado comenzó la semana pasada a escuchar propuestas para prevenir la violencia, pero es hora de dejar de debatir y comenzar a actuar”, ha recordado el presidente. “No tenemos que estar de acuerdo en todo para estar de acuerdo en que algo hay que hacer. Es nuestra responsabilidad como americanos y es por lo que yo voy a pelear mientras siga siendo vuestro presidente”, ha dicho Obama.

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Antes de pronunciar su discurso, el presidente ha recorrido la zona norte de Minneapolis, de mayoría afroamericana y una de las  más deprimidas de la localidad, que concentró las dos terceras partes de los casos de violencia por arma de fuego de la ciudad registrados en 2012. El presidente también se ha reunido con responsables políticos y miembros del cuerpo de policía para estudiar las iniciativas para atajar la violencia que se han puesto en práctica en la ciudad en los últimos años y estudiar si se pueden aplicar a nivel nacional.

En la década de los 90, cuando el crack y la guerra entre pandillas atenazaban la localidad, Minneapolis llegó a tener un índice de criminalidad semejante al de Nueva York. A mediados de la pasada década, los homicidios -muchos por armas de fuego- entre los jóvenes de entre 15 y 24 años se convirtieron en la primera causa de muerte entre la población de esa edad. Los esfuerzos de la ciudad por atajar esa violencia han provocado un descenso del 66% en el número de casos de menores envueltos en incidentes relacionados con armas de fuego y en la reducción de los tiroteos. La Casa Blanca ha alabado el esfuerzo de sus responsables en su lucha para reducir la criminalidad.

La defensa de Obama de su plan de control de armas viene precedida de la publicación este fin de semana por parte de la Casa Blanca de una foto del presidente practicando el tiro al plato en la residencia de Camp David. El mandatario reconoció a The New Republic que le solía disparar con los invitados que le iban a visitar allí. Este mismo lunes, el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, ha reconocido que se decidió difundir la imagen ante las dudas de algunos medios de comunicación sobre la veracidad de las declaraciones del presidente en esa entrevista.

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Sobre la firma

Eva Saiz
Redactora jefa en Andalucía. Ha desarrollado su carrera profesional en el diario como responsable de la edición impresa y de contenidos y producción digital. Formó parte de la corresponsalía en Washington y ha estado en las secciones de España y Deportes. Licenciada en Derecho por Universidad Pontificia Comillas ICAI- ICADE y Máster de EL PAÍS.

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