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El Gobierno mexicano achaca a una acumulación de gas la explosión en Pemex

El fiscal general de México descarta la presencia de explosivos en la torre La empresa privada que daba mantenimiento al edificio pone en duda la versión oficial

Salvador Camarena
Maqueta de la torre para explicar el accidente.
Maqueta de la torre para explicar el accidente.Sáshenka Gutiérrez (EFE)

El Gobierno mexicano ha descartado que la explosión ocurrida en el edificio B2 del centro administrativo de Petróleos Mexicanos (Pemex) el pasado jueves, que causó la muerte de 37 personas, se haya debido al uso de explosivos. Jesús Murillo Karam, procurador (fiscal) general de la República, informó a la prensa en la noche del lunes de que “la causa es clara, es una explosión de gas” originada en el sótano del edificio. Murillo Karam insistió en que no se detectaron explosivos porque “no existe en la zona afectada un cráter”, daño típico del empleo de los mismos.

Lo que el Gobierno de Enrique Peña Nieto aún no ha podido explicar es qué tipo de gas fue el que provocó la destrucción de prácticamente cuatro pisos del edificio B2, adjunto a la emblemática Torre de Pemex, ni la fuente del mismo, ni cómo llegó al sótano del inmueble. El fiscal mencionó que podría tratarse de gas metano, pero insistió en que aún tendrán que ampliar los peritajes antes de afirmar con precisión cómo se pudo acumular tal cantidad de gas como para provocar una explosión que sacudió y desplazó las tres plantas superiores, mató a decenas de personas e hirió a un centenar, de las cuales 29 continúan ingresadas en hospitales, algunas en estado muy grave. El funcionario explicó que las investigaciones podrían, eventualmente, aportar elementos para determinar si existen responsables de la tragedia.

Según lo relatado por el fiscal, la explosión habría ocurrido en el sótano del edificio de 13 plantas, en el que cuatro trabajadores de la empresa Conservación Pilotes de Control SA (Copicosa), contratada por Pemex, realizaban labores de mantenimiento en unos pilotes. Murillo Karam informó de que el jefe de esa cuadrilla logró escapar de la muerte, mientras que los cuerpos de sus tres compañeros presentaban quemaduras (los únicos de todos los fallecidos con esas lesiones). Los trabajadores, siempre de acuerdo con los datos preliminares dados a conocer por el fiscal, habrían

Murillo Karam dijo que el gas pudo provenir de un pequeño edificio aledaño al complejo administrativo de Pemex, en el que se almacena gas natural. Esos edificios, explicó, están conectados mediante túneles construidos hace aproximadamente 40 años.

Antes de dar a conocer su informe, el fiscal agradeció la ayuda en las investigaciones de peritos de agencias gubernamentales mexicanas, así como de la Policía Nacional de España, de la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, y de la compañía SGS de Reino Unido.

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