Merkel visita por sorpresa a las tropas alemanas destacadas en Afganistán

La canciller alemana Angela Merkel ha destacado este viernes la importancia del "laborioso" proceso político afgano para el éxito de la misión de la OTAN en el país, en una visita sorpresa a las tropas alemanas desplegadas en el norte de Afganistán.

Acompañada por el ministro de defensa alemán, Thomas de Maizière, Merkel ha visitado Kunduz poco después de llegar a la base del Ejército germano en Mazar-i-Sharif, aunque los detalles de la visita no han sido revelados por razones de seguridad.

Merkel ha reconocido que el proceso político afgano progresa "a veces un poco más lento" de lo deseable, "pero es esencial si queremos que nuestro compromiso militar (...) sea realmente un éxito", ha dicho, refiriéndose en particular a las elecciones del próximo año para decidir el sucesor del presidente Hamid Karzai, que no puede optar a un tercer mandato.

Fuentes de la presidencia afgana no han podido confirmar si la canciller viajará a la capital, Kabul, para encontrarse con Karzai. "Merkel volverá a Mazar-i-Sharif, en la tarde. Está aquí para mostrar su apoyo a nuestras tropas, asistir a reuniones y abordar las preocupaciones existentes después de la reciente muerte de uno de nuestros soldados", ha informado a la agencia AFP un portavoz del ejército alemán en Afganistán.

La visita se produce seis días después de la muerte de un soldado de las Fuerzas Especiales durante una operación conjunta con el ejército afgano contra los insurgentes en la provincia de Baghlan, al norte del país. Fue el primer militar alemán en morir en Afganistán en dos años.

Merkel ha reiterado su compromiso de mantener a los soldados alemanes en tierras afganas hasta el final de la misión de la OTAN a finales de 2014. Ya el 18 de abril Berlín anunció su intención de prolongar la estancia de entre 600 y 800 soldados en misión de entrenamiento, asesoramiento y apoyo entre 2015 y 2017.

El mantenimiento de las bases y tropas extranjeras en Afganistán es rechazado rotundamente por los talibanes, que hasta ahora siempre han afirmado que la retirada total es una de las condiciones para cualquier negociación de paz.

Cerca de 100.000 soldados extranjeros están desplegados actualmente en Afganistán bajo los auspicios de la OTAN. El alemán es el tercer mayor contingente de la misión después de Estados Unidos y Reino Unido, a pesar de haber reducido su presencia de 5.000 a 4.200 efectivos.

Expulsados del poder en 2001, los talibanes mantienen una insurgencia armada contra el Gobierno afgano y las fuerzas internacionales, sobre todo en el este y el sur del país, sus principales bastiones.