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Holanda pide excusas a Rusia por la detención de un diplomático en La Haya

La policía entró en su casa por un presunto caso de maltrato de menores Los medios holandeses señalan que Dimitri Borodin estaba borracho y pegó a sus hijos

Isabel Ferrer
La embajada rusa en La Haya.
La embajada rusa en La Haya. L. VAN LIESHOUT (EFE)

Holanda ha pedido oficialmente excusas a Rusia por la detención de Dimitri Borodin, su canciller en la embajada de La Haya. El arresto violó la Convención de Viena de 1961, que regula la inmunidad diplomática y ha sido firmada por ambos países. El presidente ruso, Vladimir Putin, había exigido la disculpa. De no producirse, hubiera podido desembocar en un conflicto entre Estados.

Los hechos ocurrieron el pasado domingo cuando la policía holandesa se personó en el domicilio de Borodin. Poco antes había recibido una llamada de los vecinos advirtiendo de que estaba maltratando a sus hijos, un niño y una niña de dos y cuatro años. Una vez en su casa, le detuvo y trasladó después a comisaría. La policía ha elaborado un informe, pero declina hablar sobre el caso. Sin embargo, el Servicio de Protección del Menor investiga el presunto abuso y algunos detalles de lo sucedido han empezado a aflorar. La televisión nacional (NOS) ha señalado que el diplomático estaba borracho cuando abrió la puerta y pegando a los niños. “Entiendo la actuación policial. Han sido profesionales, pero el arresto contraviene la Convención de Viena y hay que pedir excusas”, ha admitido Frans Timmermans, ministro de Exteriores. La esposa del diplomático también ha tenido un encuentro con la policía. Horas antes de que acudieran a su domicilio, chocó contra cuatro coches al aparcar el suyo en la calle. La prensa nacional señala que también había bebido.

“Hubiera sido muy extraño que la policía no acudiera a una llamada de auxilio con niños de por medio. Peor habría sido de no haberlo hecho”, ha declarado el sindicato policial, al enterarse de la disculpa. El Parlamento holandés ha apoyado al titular de Exteriores y queda por ver si el asunto se resuelve de forma salomónica. Al gozar de inmunidad fuera de su país, la única manera de tratar a un diplomático que comete una infracción en el extranjero es declararlo persona non grata y pedir su traslado.

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