_
_
_
_
_

Asesinados en México dos funcionarios de alcaldías en menos de 24 horas

Cuatro de cada 10 alcaldes mexicanos están amenazados por el narcotráfico, denuncia una organización

Un operativo policial en Aguililla (Michoacán).
Un operativo policial en Aguililla (Michoacán).Ronaldo Schemidt (AFP)

Un mando policial de Puruándiro, a 360 kilómetros al oeste de la Ciudad de México, murió tiroteado la madrugada de este miércoles. La policía recogió 50 casquillos de la escena. Horas antes, a otro funcionario municipal, esta vez de Taretán (a 400 kilómetros de la capital) lo hallaron degollado. Es el parte de guerra de las últimas 24 horas en Michoacán, uno de los epicentros de la violencia en el país y el reflejo de que los gobiernos municipales son uno de los blancos más vulnerables del crimen organizado: cuatro de cada 10 alcaldes mexicanos están amenazados y 1.200 funcionarios han sido asesinados en los últimos cuatro años.

Desde 2009, 43 alcaldes han sido asesinados y otros 30 secuestrados, según ha denunciado esta semana la Federación Nacional de Municipios de México (Fenamm). México tiene 2.457 alcaldes y la organización calcula 983 han sido amenazados por carteles del narcotráfico: un 40%.

En solo cuatro años, han muerto cerca de 1.200 funcionarios municipales. 43 eran alcaldes

La inseguridad es tal que algunos alcaldes ni siquiera viven en sus municipios. En las localidades fronterizas del norte es común que el presidente municipal duerma en Estados Unidos, señaló Leticia Quezada, presidenta de la organización.

Por si fuera poco, las mafias presionan a los gobiernos locales para que les den dinero de las ya de por sí saqueadas arcas municipales. El 70% de los municipios mexicanos están en la bancarrota. Ygnacio López Mendoza, alcalde de Santa Ana Maya (Michoacán) mantiene una huelga de hambre frente al Senado mexicano desde el pasado viernes 4 de octubre para exigir más recursos para los municipios.

Michoacán vive otra jornada violenta

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Muchos de los habitantes de Tierra Caliente, la región más peligrosa de un de por sí peligroso Estado (Michoacán), libran una encarnizada batalla desde que en febrero salieran a la luz los grupos de autodefensa: patrullas comunitarias que han tomado las armas para enfrentarse al cartel de Los Caballeros Templarios, que domina la zona. Los pobladores acusan a la policía municipal (México tiene más de 1.600 cuerpos policiales independientes entre sí) de trabajar para las mafias. Un policía municipal en México gana 5.000 pesos al mes (unos 378 dólares), 10 veces menos que un agente federal.

El crimen organizado, además, mantiene retenes en las carreteras de la región. Eduardo Sánchez, portavoz de seguridad del Gobierno de Enrique Peña Nieto, reconoció este miércoles que los bloqueos en los caminos han causado escasez de alimentos y gasolina en varios pueblos. El comisionado de seguridad nacional, Manuel Mondragón y Kalb, ha dado órdenes para que el Ejército y la policía federal “se hagan cargo del tema”.

Mientras tanto los muertos se acumulan a cuenta gotas. Este miércoles han sido dos, pero en los últimos 10 días han muerto por lo menos 10 personas. El fin de semana hallaron a tres supuestos miembros de grupos de autodefensa en un paraje en Los Reyes, otro pueblo de la zona, donde días atrás habían descubierto a otros tres cuerpos decapitados. El 14 de septiembre pasado, un diputado local fue muerto a golpe de machete en Morelia, la capital. Las autoridades dicen que fue un asalto. México suma 70.000 muertos y más de 30.000 desaparecidos desde el inicio de la ofensiva contra el narcotráfico en diciembre de 2006.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_