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Los manifestantes tailandeses echan a la primera ministra de un edificio policial

Al menos dos muertos en Bangkok en choques entre los leales al Gobierno y las fuerzas opositoras, que consiguen hacerse con el control de algunos edificios oficiales

Manifestantes opositores intentan romper una barricada en Bangkok.
Manifestantes opositores intentan romper una barricada en Bangkok.C. SUBPRASOM (REUTERS)

Un partidario del Gobierno tailandés ha sido asesinado a tiros en la madrugada de este domingo en las protestas de Bangkok, elevando la cifra a dos muertos, mientras los manifestantes invadían un complejo policial y obligaban a la primera ministra, Yingluck Shinawatra, a ser evacuada a un lugar secreto.

A medida que las multitudes se reunían, los manifestantes antigubernamentales han tomado el control de Thai PBS, la cadena de televisión estatal, y el equipo de Yingluck ha cancelado una serie de entrevistas programadas con los medios, informa la agencia Reuters. Al mismo tiempo, en el principal complejo de oficinas del Gobierno, ubicadas entre los templos y edificios históricos del centro de Bangkok, la policía ha lanzado gases lacrimógenos y ha utilizado cañones de agua para evitar que los manifestantes invadieran las instalaciones, según informa el Bangkok Post citando a un portavoz del Centro del Gobierno para la Administración de la Paz y el Orden.

Unos manifestantes llegaron a entrar en la zona exterior del club deportivo de la policía donde la primera ministra tenía planeado conceder entrevistas a diferentes medios durante la mañana, pero Yingluck fue capaz de salir de las instalaciones y dirigirse a un lugar secreto seguro, dijo un asistente citado por Reuters. En el edificio se oían silbidos, un símbolo del fin de la administración de Yingluck, y miembros de las protestas acusaban en voz alta a la primera ministra de representar a su hermano Thaksin Shinawatra, exjefe de Gobierno de Tailandia y considerado por los manifestantes el verdadero poder en la sombra detrás de su hermano. Un funcionario del Gobierno declaró, según Reuters, que Yingluck ha abandonado su oficina, pero no reveló su ubicación actual por razones de seguridad.

La oposición, encabezada por el Partido Democrático, había declarado que el domingo iba a ser el día de la victoria, la culminación de un intento de derrocar a Yingluck y terminar con la influencia de su familia en la política tailandesa. Los líderes de la protesta habían instado a los participantes a apoderarse de diez oficinas gubernamentales, seis estaciones de televisión, la sede de la policía y las oficinas de la primera ministra en lo que han llaman un "golpe de la gente".

En el plan original, las protestas deberían calmarse a partir del lunes en señal de respeto por el rey Bhumibol Adulyadej, legalmente una figura sagrada en el país, que cumple 86 años el día 5.

Pero este domingo 17 batallones de 150 soldados cada uno y 180 policías militares, no armados, han sido llamados para reforzar la seguridad. La policía ha dicho que alrededor de 30.000 personas se han reunido en al menos ocho lugares, informa Reuters.

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Dos personas han muerto y 45 personas han resultado heridas, y ha habido algunos heridos por disparos, dijo el portavoz del centro gubernamental de la paz, en una situación que ha agitado temores de que los siete días de protestas contra el gobierno de Yingluck no terminen y se desborden en violencia generalizada.

Hoy los líderes de los camisas rojas —el Frente Unido para la Democracia y la Dictadura, leal a Shinawatra— han pedido a los manifestantes en el estadio, donde había decenas de miles decenas de miles de personas el sábado por la noche, que se vayan a casa para evitar una mayor confrontación con los grupos antigubernamentales. Miles de camisas rojas han empezado a regresar a sus hogares en el norte de Tailandia

Las luchas callejeras entre manifestantes antigubernamentales y los partidarios del Gobierno empezaron el sábado por la noche, cuando un grupo de estudiantes de una universidad local atacaron un autobús y un taxi que creían estaba llena de partidarios del gobierno. Se oyeron disparos, pero no se sabe quién disparó.

Alrededor de las 2 de la madrugada, Kittisak Srisunthorn , de 36 años, dijo que recibió un disparo en el brazo mientras estaba sentado con un grupo de guardias de camisas rojas . "Escuché bombas caseras, disparos. La gente comenzó a lanzar piedras y botellas de vidrio. Había un centenar de personas reunidas”, dijo Kittisak a Reuters. “No vi a ningún policía".

Estas protestas son las más grandes en Bangkok desde que Yingluck llegó al poder, la peor crisis política de Tailandia que terminó con una represión militar y más de 90 muertos, y están agravando las preocupaciones sobre la estabilidad de la que en algún momento fue teóricamente era una de las democracias más fuertes de Asia.

Las manifestaciones para forzar la dimisión del Gobierno empezaron en octubre cuando el gobierno de Yingluck trató de aprobar una ley de amnistía que habría permitido a Thaksin regresar a Tailandia sin ir a la cárcel . Decenas de miles de personas salieron a las calles en protesta, en una repetición de una muestra del mismo tipo de oposición popular que ayudó a allanar el camino para el golpe de Estado que derrocó a Thaksin en 2006.

Yingluck rápidamente dio marcha atrás en el plan, pero las manifestaciones continuaron, y agravaron la tensión entre los partidarios del gobierno y la oposición.

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