Pemex dejará a la inversión privada la exploración de aguas y gas de esquisto

Petróleos Mexicanos (Pemex) desea conservar todas las reservas probadas de hidrocarburos –unos 14.000 millones de barriles de petróleo—para ubicarse entre las primeras cinco empresas petroleras del mundo por el valor de sus reservas. La Secretaría de Energía de México ha desvelado algunos detalles de la llamada ‘ronda cero’, el listado de 68 páginas en el que la petrolera expone los yacimientos que desea conservar ante la implementación de la reforma energética que abre el sector a la iniciativa privada. En su petición, Pemex señala que dejará a la inversión privada, principalmente, la exploración de campos en aguas profundas y gas de esquisto.

La propuesta de Pemex sugiere que dentro del campo de la exploración la petrolera buscará quedarse con el 95% de áreas terrestres, 59% de yacimientos en aguas someras, 29% en aguas profundas y 15% en campos de gas de esquisto. Todas estas zonas propuestas por la petrolera suman apenas el 31% de áreas a explorar en México, por lo que en el 69% restante estarían los campos donde la iniciativa privada tendría una importante oportunidad para incursionar en el mercado energético mexicano. La Secretaría de Energía ha asegurado que las compañías privadas del sector han mostrado interés en los yacimientos de aguas profundas –principalmente en el Cinturón Plegado Perdido (ubicado al norte del Golfo de México, en la frontera con las aguas de Estados Unidos) — y en los campos con gas de esquisto al norte del país que representan la sexta reserva del mundo.

El Gobierno mexicano tiene hasta el 17 de septiembre para decidir sobre los campos que la petrolera estatal conservará. “Esta es la solicitud que Pemex nos ha hecho, eso no quiere decir que esto es lo que la Secretaría de Energía le va a dar a Pemex. Evidentemente ellos quieren quedarse con lo más posible y tienen una visión a largo plazo con un enfoque más empresarial”, ha explicado Lourdes Melgar, subsecretaria de Hidrocarburos. Melgar ha reconocido que México podría comenzar a entregar permisos a las compañías privadas para la exploración de hidrocarburos en 2015.

“Pemex no se va a quedar desprotegida”, ha insistido Melgar. La petrolera mexicana ha apostado por mantener, además del 100% de las reservas probadas (también llamadas 1P), el 83% de las reservas probadas y probables (2P), y el 71% de las reservas probadas, probables y posibles (3P). La subsecretaria de Hidrocarburos ha explicado que la mayoría de los países no ofrecen la extracción de reservas en las rondas concurso para las compañías privadas, por lo que México será atractivo para la inversión privada y extranjera. “Es inusual que se ofrezca producción certificada, esto hará a las siguientes rondas atractivas para la inversión”.

La funcionaria ha adelantado que Pemex podría quedarse también con los proyectos de exploración en la Cuenca del Sureste (Costas de los Estados de Tabasco y Campeche) donde la petrolera tiene su mayor experiencia, así como una pequeña porción –un 15%-- de los campos de gas de esquisto. Sin embargo, Melgar ha reconocido que habrá un importante análisis en los campos de aguas profundas, un área que aún no está dominada por la mexicana y donde “Pemex tendría que llevar a cabo asociaciones para desarrollarlos” y en la asignación de campos en Chicontepec (Estado de Veracruz, este del país) donde la petrolera no ha tenido resultados exitosos.

La reforma energética de México aún espera la redacción de las leyes secundarias, que podrían aprobarse en las próximas semanas en el Congreso, para echar a andar la apertura del sector a la inversión privada. Hasta entonces, ha explicado la subsecretaria de Hidrocarburos, Pemex no podrá celebrar contratos para asociarse con otras compañías. Los funcionarios de la Secretaría de Energía junto a los de la Comisión Nacional de Hidrocarburos estudiarán durante los próximos meses la propuesta de Pemex y condicionarán los resultados a la capacidad de la petrolera de demostrar que puede explotar y explorar los campos que pide.

Melgar ha planteado la posibilidad de que la Secretaría de Energía entregue los resultados de su estudio a la petrolera de manera escalonada para evitar que la incertidumbre en Pemex se prolongue hasta septiembre. Las peticiones específicas de la compañía estatal, sin embargo, permanecerán bajo el resguardo del Gobierno mexicano que ha clasificado esta información como estratégica para la petrolera. “Hay información con valor comercial y estratégico para la empresa que por lo tanto no la podemos hacer pública. Tenemos que ser cuidadosos de dar información para ser transparentes y a la vez no dar información que no es práctica internacional que se dé”, explicó la funcionaria.