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Honduras pedirá a EEUU que no devuelva a los niños migrantes a su país de origen

Tegucigalpa anunció que propondrá a Washington plan basado en los tratados internacionales de protección de la infancia

Un centro de detención para inmigrantes ilegales, en Texas
Un centro de detención para inmigrantes ilegales, en TexasReuters

Honduras anunció el martes que propondrá a la Casa Blanca que se permita quedarse en Estados Unidos con sus padres a los menores no acompañados que son detenidos al intentar cruzar ilegalmente a territorio americano. Tegucigalpa ha hecho esta propuesta con base en el principio de “interés primordial de los menores” y de los tratados internacionales de protección y resguardo de la infancia, además de la reunificación familiar. 

La iniciativa diplomática hondureña coincidió con una serie de gestiones que se han desplegado para identificar a niñas y niños nacidos en Honduras que están retenidos en albergues en Estados Unidos. En los últimos meses ha aumentado el flujo de menores centroamericanos no acompañados que intentan cruzar la frontera.

La ministra de Relaciones Exteriores de Honduras, Mireya Agüero, explicó que el núcleo de esta propuesta "es decirle al Gobierno norteamericano que trabajemos juntos en función del interés privilegiado que los menores tienen aquí y en todo el mundo". El Gobierno de Honduras, dijo "está invocando tratados internacionales que hablan de la protección de la niñez”.

“Dentro de nuestras atribuciones la Cancillería está brindado protección a los hondureños en el exterior y en ese sentido estamos trabajando en esa propuesta que presentaremos próximamente, para que en caso de una deportación que no tenga otra posibilidad legal de acuerdo a las leyes norteamericanas, estas se hagan en tiempo que no implique la deportación de los padres. Si vamos a hablar del principio de reunificación familiar, ¿entonces por qué no reunificarlos en los Estados Unidos?”, cuestionó.

Agüero reveló que “ya se han girado instrucciones precisas a la Embajada de Honduras en Washington para trabajar en una propuesta que será presentada a la brevedad posible".

Honduras también informó a Washington que el estatal Instituto Hondureño de la Niñez y la Familia (IHNFA) está bajo un proceso de intervención interna. “Hemos hecho notar al Gobierno de los Estados Unidos que la capacidad institucional en este momento para recibir flujos migratorios importantes de menores los deja de alguna manera desprotegidos”.

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La propuesta se hizo 72 horas antes de que Joe Biden, el vicepresidente de Estados Unidos, visite la capital guatemalteca para reunirse con los presidentes de Guatemala, Otto Pérez Molina y de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, y con un emisario de alto rango del presidente de Honduras para aclarar la posición de la Casa Blanca frente a la crisis migratoria de los menores “no acompañados”. Biden advertirá a los gobiernos del denominado Triángulo Norte de Centroamérica que “no hay esperanzas” de que los menores no acompañados puedan quedarse a residir legalmente en esa nación.

En declaraciones a la prensa hondureña desde Brasil, donde asiste al Campeonato Mundial para respaldar a la selección de fútbol de su país, el presidente Juan Orlando Hernández instó a Washington a que conceda un “trato humanitario” a los miles de menores no acompañados que permanecen retenidos en albergues e instalaciones militares. "Necesitamos un trato de altura, son niños, son seres humanos, son gente humilde, gente con el deseo de encontrarse con su familia y ¿quién no va a querer hacerlo?”.

Datos de la Comisión Nacional de Derechos Humanos de Honduras difundidos a inicios de este mes mostraron que, de acuerdo con informes procedentes de Estados Unidos, los agentes fronterizos detuvieron en 2012 a 13.625 menores migrantes centroamericanos no acompañados, cifra que aumentó a 24.668 en 2013 y se espera que al final del 2014 podría exceder los 60,000. La mayoría de ellos hondureños. El promedio de infantes migrantes de Centroamérica retenidos en Estados Unidos osciló de 6.000 a 7.500 al año entre 2008 y 2011, precisó.

Unos 47.000 menores han cruzado la frontera mexicano—estadounidense por vías ilegales en 2014, según distintas cifras divulgadas en Honduras por activistas de derechos humanos.

El presidente ordenó que, mediante los municipios, se gestione la información de los parientes de los menores, para poder identificarlos y entregarles sus respectivos documentos.

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