Peña Nieto destaca el crecimiento del mercado interno mexicano

En un entorno volátil, México crece. Con este mensaje, el presidente Enrique Peña Nieto apartó este viernes el pesimismo de su lado y destacó el fortalecimiento del mercado interno. “En marzo las ventas al menudeo crecieron al 5,5%, y en abril la tasa de desocupación se situó en el 4,3%, la más baja para ese mes desde 2009”, afirmó.

Para el mandatario estos datos muestran que la economía mexicana camina por la “ruta correcta”. “El país está teniendo cada vez mayor dinamismo y genera mayor confianza. El mundo observa que en México hay estabilidad social y política, un clima de paz laboral y reformas estructurales que potencian el crecimiento”, declaró durante la presentación en el complejo presidencial de Los Pinos del plan inversor de la compañía Grupo Modelo en Yucatán, cifrado en 5.000 millones de pesos (335 millones de dólares). “Es importante porque viene a consolidar la industria cervecera de nuestro país. Somos ya el sexto productor mundial de cerveza y el primer exportador a nivel mundial”, indicó Peña Nieto.

La industria cervecera, con una producción al alza, representa uno de los brazos fuertes de la balanza exterior

La industria cervecera, con una producción al alza, vive un buen momento. No sólo ha generado 55.000 empleos directos (2,5 millones de indirectos) sino que representa uno de los brazos fuertes de la balanza exterior. México vendió en 2014 al extranjero 1.700 millones de litros de cerveza (un 19% más que el año anterior), que generaron ventas por valor 1.600 millones dólares.

Peña Nieto se sirvió de este sector como ejemplo de la senda que debe seguir el país. “Más allá del entorno global del que somos parte, complejo, volátil, con desaceleración económica en algunas regiones, nuestro mercado interno está cambiando positivamente, y eso nos va a permitir generar mayor crecimiento económico”, concluyó.

Las palabras del presidente llegan cuando el objetivo de un crecimiento fuerte, del 5%, ha vuelto a desvanecerse para México. El Banco de México calcula que la subida del PIB oscilará este año en una horquilla situada entre el 2% y el 3%. Un pronóstico frío, muy similar al del año anterior y que responde a un recorte de medio punto en las previsiones.