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Los republicanos ignoran la principal cita electoral latina en Estados Unidos

Casi todos los candidatos le dan la espalda a la convención de la más influyente organización hispana

Silvia Ayuso
Ben Carson, el único candidato republicano que acudió a Las Vegas
Ben Carson, el único candidato republicano que acudió a Las VegasSTEVE MARCUS (REUTERS)

"El próximo presidente de Estados Unidos será elegido por la comunidad latina", proclamaba el director ejecutivo de la Asociación Nacional de Funcionarios Latinos Electos (NALEO), Arturo Vargas, al anunciar la conferencia que esta organización latina, una de las más influyentes de Estados Unidos, celebra esta semana en Las Vegas. Una cita, agregó al inaugurarla el miércoles, que “marca el inicio de la campaña presidencial por el voto latino”. Pero que ha sido ampliamente ignorada por la parte republicana.

Pocos disputan la importancia del voto latino en elecciones presidenciales. En 2012, buena parte de la debacle electoral del candidato republicano, Mitt Romney, se debió a la falta de apoyos que consiguió del electorado latino: solo logró el 27 % de los votos hispanos, frente al 71 % que se llevó Barack Obama. El demócrata reconoció que había logrado la reelección gracias al respaldo hispano.

Estrategas republicanos admiten que para poder llegar a la presidencia, los candidatos necesitan alrededor del 40 % del voto latino. Tras el descalabro de 2012, el Partido Republicano reconoció además públicamente que tenía que cambiar su discurso migratorio, principal obstáculo en sus intentos de conquistar el electorado latino.

Pero menos de tres años más tarde, la lección parece olvidada. Cualquier iniciativa migratoria ha muerto en los pasillos del Congreso y las acciones ejecutivas de Obama para regularizar temporalmente a hasta cinco millones de indocumentados están frenadas por la justicia, a petición republicana.

La convención de NALEO, en la que participan más de mil de los latinos más influyentes de todo el país, pretendía escuchar a todos los candidatos, demócratas y republicanos, que aspiran a convertirse en el próximo inquilino -o inquilina- de la Casa Blanca.

El lado republicano, sin embargo, ha hecho caso omiso. Solo uno de los hasta ahora 11 candidatos oficiales, el neurocirujano afroamericano retirado Ben Carson, aceptó la invitación y se subió al podio, el miércoles, para discutir su visión sobre el futuro de EE UU y, sobre todo, sus políticas migratorias.

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"Incompatibilidad de agenda" ha sido la respuesta más común de la mayoría de los candidatos republicanos para justificar su ausencia en Las Vegas. Según la prensa, esa ha sido la excusa usada incluso por los candidatos que más apelan a los hispanos por sus raíces o sintonía, como el cubano-estadounidense Marco Rubio o el exgobernador de Florida Jeb Bush.

Pero ninguno parece haber tenido problemas para acudir, esta misma semana en Washington, a la convención “Camino a la mayoría” organizada por la conservadora Coalición Fe y Libertad. En su agenda sí que están confirmados tanto Rubio como Bush y la mayoría del resto de aspirantes republicanos, como Lindsey Graham, George Pataki, Rand Paul o Ted Cruz, entre otros.

Al congresista demócrata -e hispano- por Arizona Rubén Gallego no le ha sorprendido la desbandada. Por miedo a perder el voto ultraconservador en las primarias que definirán al candidato republicano, aspirantes como Rubio o incluso Bush, sostiene, “dicen cosas distintas” en materia migratoria cuando hablan ante una audiencia anglohablante o una hispana. Su esperanza es prolongar lo más posible ese “doble discurso”, señala. Una cita como la de NALEO, sin embargo, les habría obligado a definirse, sobre todo después de que su principal rival demócrata, Hillary Clinton, que sí acudió este jueves a Las Vegas, se ha pronunciado claramente a favor de la reforma migratoria y las medidas ejecutivas dictadas por Obama.

Y en Las Vegas, lo volvió a hacer.

"Seguiré luchando por una reforma migratoria integral con un verdadero camino hacia la ciudadanía para familias", prometió Clinton durante su discurso. "Combatiré cualquier intento de exponer a los dreamers a la deportación y, como he dicho, si el Congreso sigue negándose a actuar, como presidenta haré todo lo posible bajo la ley para ir más allá aún de lo que el presidente Obama ha intentado lograr"; agregó en medio de un cerrado aplauso.

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Sobre la firma

Silvia Ayuso
Corresponsal en Bruselas, después de contar Francia durante un lustro desde París. Se incorporó al equipo de EL PAÍS en Washington en 2014. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, comenzó su carrera en la agencia Efe y continuó en la alemana Dpa, para la que fue corresponsal en Santiago de Chile, La Habana y Washington.

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