Mueren dos palestinos tras las protestas por la muerte de un menor
Los jóvenes, de 17 años, recibieron disparos del ejército israelí en dos incidentes separados: en Gaza y Cisjordania
En medio de una gran tensión en los territorios ocupados, dos jóvenes palestinos fallecieron por disparos del Ejército israelí durante las protestas por la muerte de un niño de 18 meses en el incendio de su casa de Duma (Cisjordania), supuestamente causado por colonos judíos. Los dos palestinos murieron en la noche del viernes al sábado en incidentes separados: uno de ellos en Cisjordania y el otro cerca de la valla fronteriza de Gaza, según fuentes médicas. Los enfrentamientos entre palestinos y colonos continuaron este sábado.
El joven muerto en Cisjordania, Laith al Jaldi, de 17 años, falleció en la noche del viernes al sábado después de ser herido por soldados israelíes cerca de Birzeit, a unos 12 kilómetros al norte de Jerusalén, en el distrito de Ramala. Al Jaldi, residente del campo de refugiados de Yalazone, recibió un disparo en el pecho tras lanzar un cóctel molotov contra un puesto militar israelí. El joven fue trasladado a un hospital de Ramala, donde fue intervenido de urgencia, pero sucumbió a sus heridas. Tras su entierro, las fuerzas israelíes hirieron con balas de goma a ocho palestinos que participaban en una protesta por la muerte de Al Jaldi.
Marchas contra la violencia
Miles de personas se concentraron este sábado en distintas partes de Israel en manifestaciones para mostrar su rechazo a la violencia y exigir al Gobierno que cese la instigación extremista, dos días después de los ataques contra la familia palestina Darawsha y también contra la comunidad gay.
El odio asesino fue el eslogan de la mayor concentración, convocada por la ONG Paz Ahora en Tel Aviv, en la que se leían pancartas con mensajes como "la incitación de la derecha asesina".
“Lloramos por el bebé y lloramos por la familia y rezamos al dios que todos compartimos. El terrorismo es terrorismo y punto”, dijo en el acto de Tel Aviv el jefe de la oposición israelí y líder laborista, Isaac Herzog.
El otro joven, Mohammed al-Masri, también de 17 años, murió cerca de la valla fronteriza al norte de Gaza debido al fuego de soldados israelíes. Un portavoz del Ejército israelí declaró este sábado que varios hombres arrojaron piedras contra la valla de seguridad y que los soldados, tras advertirles de que no se acercaran, dispararon primero al aire antes de tirar “a las extremidades inferiores de los sospechosos”.
Con estas dos muertes se eleva a una veintena el número de palestinos muertos por fuego de las fuerzas israelíes en lo que va de año, según datos de la agencia palestina Maan.
Los palestinos ya han pedido al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, el establecimiento de una fuerza internacional de protección para los pobladores árabes tanto de Cisjordania como de la franja de Gaza.
Los miembros de la familia del bebé muerto el viernes, Ali Dawabsha, se hallaban este sábado ingresados en estado muy grave en hospitales israelíes. Según fuentes hospitalarias, la madre, Reham, tiene quemaduras de tercer grado en el 90% de su cuerpo; el hermano, de cuatro años, sufre quemaduras de segundo grado en el 60% de su cuerpo; mientras que el padre, Saad, tiene el 80% abrasado con quemaduras de segundo grado.
Este sabado continuaron los enfrentamientos entre extremistas israelíes y palestinos. Colonos del asentamiento de Esh Kedosh atacaron a palestinos de un pueblo cercano, al sur de Nablús, según informa el diario israelí Haaretz. Aunque no hubo heridos, fue necesaria la intervención del Ejército israelí. En la localidad de Kursa, otro grupo de extremistas israelíes agredieron a granjeros palestinos. La mediación de activistas locales calmó la situación y finalmente los colonos abandonaron el lugar.
Heridos dos policías
Además, dos policías israelíes resultaron heridos en enfrentamientos con palestinos durante la noche del viernes en el campo de refugiados de Shuafat, en el territorio ocupado de Jerusalén Este, según informó este sábado la portavoz policial Luba Samri.
También en el barrio musulmán de la Ciudad Vieja jóvenes palestinos lanzaron piedras y fuegos artificiales a agentes de la policía.
Un desconocido arrojó un cóctel molotov contra una vivienda judía en Jabal Mukaber, que incendió parte del jardín. Otro hombre atacó con un artefacto incendiario otra cosa de colonos judíos en el barrio palestino de Beit Hanina.
“La Policía de Jerusalén tendrá tolerancia cero con cualquier incidente de violencia. La Policía y la Inteligencia trabajan para detener a los culpables y a los alborotadores y presentarlos ante la Justicia”, señaló la portavoz policial en una nota.
