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El atacante abatido por la policía en París llevaba una bandera del ISIS

En su cadáver se ha hallado también una reivindicación escrita en árabe

Cadáver del hombre abatido por la policía.Foto: reuters_live | Vídeo: Reuters Live! / Reuters

Un año exacto después de la masacre de Charlie Hebdo, prácticamente a la misma hora en la que los hermanos Kouachi asesinaban allí a 12 personas, la policía mató este jueves a un hombre que trató de entrar en una comisaría parisiense armado con un cuchillo de carnicero y con un cinturón explosivo falso. El individuo sacó su arma y gritó “Allahu akbar” (“Alá es grande”), según la fiscalía, que ha abierto una investigación por tentativa de asesinato con fines terroristas. El hombre llevaba un papel con la bandera del Estado Islámico (ISIS, en sus siglas en inglés) y una reivindicación manuscrita en árabe.

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Las huellas del atacante corresponden a las de un individuo que declaró ser un marroquí de 20 años, pero los investigadores debían confirmar todavía anoche que se trataba de su verdadera identidad.

Sobre las 11.30, el individuo intentó entrar “con actitud amenazante”, según la policía, en la comisaría a cuya entrada se encontraban dos agentes. Sacó su arma y gritó “Allahu akbar” (“Alá es grande”, en árabe), según detalló la fiscalía. Se dirigió hacia los policías a gran velocidad, estos le gritaron que se detuviera pero siguió avanzando y los agentes abrieron fuego, según relató a la agencia France Presse una vecina que presenció la escena desde la ventana de su apartamento. Una vez en el suelo, los agentes descubrieron que llevaba debajo del abrigo lo que parecía un cinturón explosivo. Resultó ser una bolsa pegada con cinta y de la que sobresalían unos cables.

La policía logró identificar al individuo durante la tarde gracias a sus huellas dactilares, según informaron fuentes de la investigación a varios medios. Corresponden a la de un hombre involucrado en un caso de robo con varias personas cometido en 2013 en el sur de Francia. Entonces declaró llamarse Sallah Ali, ser un sin techo, y haber nacido en Casablanca (Marruecos) en 1995. Los investigadores tratan de confirmar que la identidad declarada en aquel momento es auténtica. En su móvil, que seguía siendo analizado, la policía encontró también mensajes de texto en árabe y en alemán.

El papel encontrado sobre el cadáver del hombre era una declaración de lealtad a Abu Baker Al Bagdhadi, el líder del ISIS, en el que el individuo dibujó la bandera de la organización y evocaba “actos para vengar los muertos en Siria”, según filtraron varios medios.

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Tres disparos

Los elementos, de momento, apuntan a que “el individuo no tiene ningún vínculo con la radicalización violenta”, afirmó, sin embargo, la ministra de Justicia, Christiane Taubira, en declaraciones a la televisión, y estimó que todos estos datos pueden apuntar también a que se trata de un desequilibrado. El ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, quien no tardó en visitar la comisaría atacada, recordó que “en un país en el que el nivel de amenaza es extremadamente elevada” los policías y los gendarmes se encuentran en primera línea.

“Estaba en casa cuando oí tres disparos, tres detonaciones muy fuertes; fue muy impresionante, tenía la sensación de estar en la sala Bataclan” atacada el 13 de noviembre por los yihadistas, señaló Stanislas Frank, un vecino de 40 años de la comisaría situada en un barrio popular y multicultural a los pies de Montmartre. Luis López, un profesor mexicano de 44 años, es también vecino y tenía a sus dos gemelos en una guardería que se encuentra a dos manzanas de la sede policial. “He podido ir a verlos, pero nos han pedido que no nos quedáramos”, señaló frente al cordón policial todavía instalado durante la tarde. “La gente pensaba que no habría ataques aquí al tratarse de un barrio con mucha población de origen magrebí, aunque realmente no tiene nada que ver”, añadió.

Muchos jóvenes, ninguno de los cuales quiso dar su nombre, denunciaban por su parte un error policial. “Se han asustado y le han disparado, sin más. La tensión era ya importante con los policías”, indicó uno de los vendedores de tabaco de contrabando que abundan en esta zona de la ciudad.

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