_
_
_
_
_

El derrame de petróleo se extiende por la Amazonía peruana

El crudo ha pasado a un río de 1.600 kilómetros de longitud debido a las lluvias. El percance ocurrió el pasado 25 de enero

Habitantes de la quebrada Inayo recogen petróleo en el río Chiriaco.
Habitantes de la quebrada Inayo recogen petróleo en el río Chiriaco.EVER YANGUA

El crudo que se extendió por la quebrada Inayo en la selva norte de Perú, distrito de Imaza, por una fisura del oleoducto Norperuano el 25 de enero, ha pasado del río Chiriaco al Marañón —de 1.600 kilómetros de recorrido y afluente del Amazonas— a causa de las últimas lluvias. Según el ministro de Ambiente, Manuel Pulgar Vidal, unos 2.000 barriles se han derramado en la zona.

Otros 1.000 barriles llegaron a Morona, departamento de Loreto, en otra fuga del mismo conducto una semana después. Pulgar Vidal ha solicitado al ministro de Salud que declare la emergencia sanitaria, en tanto que la población afectada denuncia que la empresa estatal PetroPerú —que opera el oleoducto— permitió que niños participaran en las operaciones de limpieza.

El martes pasado una fuerte lluvia amplió la zona afectada en Chiriaco (Imaza) de cuatro a 30 kilómetros, según reportes locales. “El día 9 hubo una lluvia terrible que hizo que los pozos [de confinamiento del crudo] se sobrepasaran”, comentó ayer en Radioprogramas Germán Velásquez, presidente de PetroPerú. Aunque negó que hubiera trazas de petróleo en el río. La ministra de Energía y Minas, Rosa María Ortiz Ríos, que sobrevoló el lugar el domingo, anunció que entregarán provisiones de “agua bebible” en la zona.

La prensa peruana y habitantes de Chiriaco han documentado desde el jueves pasado que los ríos Chiriaco y Marañón están contaminados. Además, refieren que niños, a los que la empresa pagaba por el crudo recogido, limpiaban el área sin equipos de protección.

Jaime Cuñachi, de 66 años, informó por teléfono a EL PAÍS, desde la comunidad de Nazareth (Chiriaco), que el jueves “entró una 4x4 con personal de PetroPerú y dijeron que pagarían para juntar el petróleo que bajaba por el río”. “Mis hijos, entusiasmados por el dinerito, se fueron sin avisarnos. Apenas pudieron juntar medio galón porque son pequeños”, comentó. Sus hijos tienen 12 y 14 años. Otra residente de Nazareth indicó que la empresa ofrecía 200 soles (57 dólares) por el cilindro de petróleo, 150 soles (42 dólares) por el bidón y 15 (cuatro dólares) por balde.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_