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Fujimori refuerza su populismo con medidas conservadoras

La candidata peruana rechaza la homosexualidad y el aborto

La imagen de Keiko en una planta de reciclado cerca de Lima.
La imagen de Keiko en una planta de reciclado cerca de Lima.M. BAZO

A menos de un mes de la segunda vuelta electoral en Perú, el 5 de junio, la candidata favorita en las encuestas y líder de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, se ha aliado con mineros informales —tras ofrecerles, de llegar a la presidencia, derogar las leyes para su formalización y crear otras—, y se ha comprometido con un grupo religioso conservador a “asumir la defensa de la familia conformada por un varón y una mujer, rechazando la unión civil de personas del mismo sexo”. La suma de aliados refuerza el populismo del fujimorismo, que reavivó la excongresista al proponer en abril la pena de muerte para violadores de niños menores de siete años.

El politólogo Martín Tanaka señala que la lógica de la campaña de segunda vuelta de Fujimori es de “derecha populista”, pero al asumir las demandas del grupo evangélico del pastor Alberto Santana y de los mineros informales, “podría caracterizarse como la de un populismo conservador”. Fujimori se enfrenta en esta segunda vuelta a a Pedro Pablo Kuczynski, de Peruanos Por el Kambio (PPK). 

Según el sociólogo, la estrategia de la hija del expresidente Alberto Fujimori “revive la peor imagen del viejo fujimorismo, clientelista y renuente a implementar reformas de segunda generación”, como por ejemplo la reforma política y la diversificación productiva.

En Perú, según el Ministerio de Ambiente, hay más de 70.000 mineros informales, que realizan la actividad incumpliendo alguno de los trámites acerca de la concesión o los permisos ambientales. Sin embargo, la consultora Macroconsult estima que son más de 100.000. Algunos de los informales realizan minería ilegal, en zonas prohibidas como áreas de conservación o reservas indígenas.

En una encuesta de Ipsos Perú divulgada el pasado domingo, Fujimori figura con un 51,4% de intención de voto frente al 48,6% de Kuczynski.

Defensa de la vida

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Fujimori firmó la semana pasada un compromiso con la Coordinadora Cívica Cristiana ProValores, constituida tras las elecciones del 10 de abril, y encabezada por Santana, quien considera que la homosexualidad es “una aberración sexual y un vicio contra la naturaleza”. Fujimori manifiesta “estar comprometida con la defensa de los valores y principios de la Palabra de Dios y defender la vida en todas sus etapas, en consecuencia: rechazar toda práctica abortiva”. En noviembre, el Congreso archivó un proyecto de ley para despenalizar el aborto en caso de violación, y el miércoles pasado la Comisión de Constitución rechazó un pedido de reconsideración del mismo, con los votos de cuatro parlamentarios fujimoristas.

El sábado, la candidata presentó al consultor internacional Hernando de Soto como su futuro asesor presidencial en formalización de la propiedad. De Soto se enfrenta a críticas en Perú debido a que su visión sobre los títulos de propiedad individual colisiona con la propiedad colectiva en las comunidades andinas y amazónicas.

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