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Chile prohíbe el Kinder Sorpresa y obliga a cambiar la cajita feliz

La nueva Ley de Etiquetado pretende atajar la alta obesidad infantil

Rocío Montes
Una cápsula del Kínder sorpresa.
Una cápsula del Kínder sorpresa.

El atractivo Kinder sorpresa, el huevito de chocolate que esconde un juguete en su interior, tiene las horas contadas en el mercado chileno. La cajita feliz (o Happy Meal), producto estrella en el segmento infantil de cadenas como McDonald’s, tampoco podrá ser comercializada con ganchos publicitarios, como regalos y juguetes. El próximo 27 de junio comenzará a regir en Chile la nueva Ley de Etiquetado de Alimentos que pretende poner freno a los altos índices de sobrepeso y obesidad, que atacan a un 64,5% de la población. El problema sanitario es especialmente complejo en los menores chilenos. De acuerdo a la información del Ministerio de Salud (MINSAL), más de un 30% de los niños y niñas de cero a siete años sufre de exceso de peso. 

“El Kinder sorpresa tiene un gancho y por lo tanto no podría ser vendido en nuestro país. La cajita de McDonald’s tiene alta cantidad (de nutrientes críticos) y no puede ser entregado con un gancho comercial. Como está la Cajita hoy, no es feliz”, indicó Tito Pizarro, jefe del Departamento de Políticas Públicas del MINSAL, según informa radio ADN. 

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La exigente ley chilena 20.606 apunta fundamentalmente a los niños, porque las autoridades pretenden incidir en su entorno alimentario. Un primer aspecto de la normativa está vinculado a la información: los productos envasados deberán tener una etiqueta que advierta sobre los altos contenidos de azúcares, sodio, grasas saturadas y calorías. Si sobrepasan los límites establecidos por el MINSAL, los productores deberán rotular el envase con un símbolo negro con letras blancas, que comienza poco a poco a observarse en los supermercados chilenos. 

Un segundo aspecto primordial de la ley es la publicidad dirigida a los niños: ninguno de los alimentos que tengan al menos uno de estos sellos negros podrá tener publicidad que apunte a los menores de edad. El Gobierno no quiere que las empresas abusen de la ingenuidad de los niños, que consumen uno u otro producto seducidos por las imágenes. De acuerdo a la nueva ley, estos alimentos con nutrientes críticos no podrán venderse, regalarse ni ofrecerse en establecimientos educativos de la primaria y secundaria. Desaparecerán de los negocios de las escuelas, donde se deberá implementar una oferta de alimentos más saludables. En algunos municipios chilenos la medida se ha ampliado y se prohibirá la venta de estos productos en los alrededores de los establecimientos educacionales. 

En el Ejecutivo indican que no se trata de prohibir un producto en particular, como el Kinder Sorpresa u otro. Pero que si el alimento supera los límites del MINSAL en adición de azúcares, grasas saturadas o sodio, y además tiene publicidad dirigida a menores y usa ganchos comerciales para su consumo, la ley 20.606 prohíbe su comercialización en el país de aquí a un mes. En el caso de las cajita feliz, no es un producto que será etiquetado, porque no está en la categoría de envasado. Pero no podrá promocionarse con juguetes si incluye hamburguesas y patatas fritas. 

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La dieta de los chilenos no es saludable. La última Encuesta Nacional de Consumo Alimentario mostró que solo un 5% de la población se alimenta de forma adecuada y un 95% requiere cambiar sus hábitos. Los mayores problemas de alimentación y de obesidad se concentran en las zonas rurales y en los estratos socioeconómicos bajos, donde se consume mayor cantidad de alimentos con altos contenidos de energía y nutrientes críticos.

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Sobre la firma

Rocío Montes
Es jefa de información de EL PAÍS en Chile. Empezó a trabajar en 2011 como corresponsal en Santiago. Especializada en información política, es coautora del libro 'La historia oculta de la década socialista', sobre los gobiernos de Ricardo Lagos y Michelle Bachelet. La Academia Chilena de la Lengua la ha premiado por su buen uso del castellano.

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