_
_
_
_
_
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

El fin del conflicto: un nuevo comienzo para la igualdad de género

Llegó el momento de entender el verdadero rol de la mujer en la esfera sociopolítica y económica de Colombia

Hoy en Colombia se vive un momento histórico como lo es la posibilidad de poner fin al conflicto armado más antiguo de mundo. Me refiero a un proceso de negociación serio y eficaz que trae consigo la oportunidad de vivir un futuro mejor para todos los que habitamos el país. Este proceso garantiza, además, saldar una deuda histórica con las mujeres que desde diferentes roles han sido parte directa o indirecta de este conflicto. Por primera vez en el mundo, la firma de un acuerdo de paz con un grupo guerrillero había dedicado un espacio de diálogo y participación a las mujeres para garantizar que en los acuerdos estuvieran incluidos asuntos relativos a sus derechos.

Entendimos la inminente necesidad de incorporar un enfoque de género en los Acuerdos de Paz, que les garantizara igualdad de condiciones y de acceso a todos y cada uno de los programas contemplados para una etapa de posconflicto. Esta intención se concretó en junio de 2014, cuando se evocó, oficialmente, la necesidad de constituir una Subcomisión de género como “uno de los tres mecanismos necesarios para agilizar y fortalecer el funcionamiento de la mesa de negociación y como una instancia fundamental para asegurar el libre ejercicio de los derechos de las mujeres”.

En las distintas sesiones de trabajo de la Subcomisión de Género se han abordado asuntos relativos a las garantía de acuerdos con un lenguaje incluyente combinando, enfoques de los derechos de las mujeres, de género, de diversidad sexual y étnica, pero con el máximo interés de extraer del imaginario colectivo la idea de que el contemplar un enfoque de género, se reducía a un simple manejo del leguaje y de la semiótica, como era el de incluir las palabras ‘las, los, ellas, o ellos’ en todos los documentos.

Nuestro esfuerzo fue más allá, reconociendo y visibilizando en el escenario público que para el caso colombiano, el conflicto armado multiplicó las agresiones ejercidas contra las mujeres, reproduciendo sistemáticamente formas de violencia padecidas en la cotidianidad y en los contextos relacionales ligados a estructuras patriarcales de asignación y comprensión de roles desde el sexo y la identidad de género. Es innegable que durante el conflicto se ha utilizado a la mujer como arma de guerra, convirtiéndolas en víctimas de violencias sexuales y otros hechos crueles y degradantes.

Por esta razón la Subcomisión de Género entregó a la Mesa de Negociación un documento que va en esta vía, partiendo desde el reconocimiento de la mujer como sujeto pleno y activo de derechos. Las recomendaciones con alcance de medida de obligatorio cumplimiento se integraran a los acuerdos llamados ‘Hacia un Nuevo Campo Colombiano: Reforma Rural Integral’, ‘Participación Política, Apertura democrática para construir la paz’ y, ‘Solución al Problema de las Drogas Ilícitas’. En el acuerdo de ‘Víctimas y los demás acuerdos alcanzados recientemente, se construyeron con la visión del tema de género desde el inicio de su elaboración.

La Subcomisión sigue en su tarea para que la temática en el Acuerdo Final visibilice el importante papel de la mujer y de las personas con identidad sexual diversa en la construcción de una paz estable y duradera.

Newsletter

El análisis de la actualidad y las mejores historias de Colombia, cada semana en su buzón
RECÍBALA

Llegó el momento de entender el verdadero rol de la mujer en la esfera sociopolítica y económica de Colombia, de reivindicar su estatus, de compensar su sufrimiento desde una óptica de mujer capaz y con derechos, sin espacios para la revictimización y el menosprecio de su condición.

María Paulina Riveros Dueñas es negociadora plenipotenciaria del Gobierno de Colombia en el proceso de paz

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_