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El Estado Islámico asume el ataque contra dos policías en Bélgica

La fiscalía ha identificado al autor de la agresión con un machete, un argelino de 33 años fichado por delitos comunes no relacionados con el terrorismo

Álvaro Sánchez
Agentes en la localidad belga de Charleroi poco después del atentado.
Agentes en la localidad belga de Charleroi poco después del atentado. FRED DUBOIS (AFP)

El Estado Islámico ha asumido este domingo la autoría del ataque junto a una comisaría del municipio belga de Charleroi, 50 kilómetros al sur de Bruselas. En el comunicado difundido por Amaq, órgano de propaganda del ISIS, el grupo terrorista califica al agresor como "soldado del Estado Islámico" y señala que su acción responde al llamamiento a atacar los países que forman parte de la coalición que combate al ISIS.

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Dos agentes resultaron gravemente heridas en la cara y el cuello con un machete como consecuencia de la agresión, que se produjo en torno a las cuatro de la tarde del sábado. El autor del ataque, que se abalanzó sobre ellas al grito de Allahu Akbar (Dios es grande) fue abatido por una tercer policía y murió en el hospital. "Las agentes demostraron un gran coraje tratando de detener al agresor", ha indicado la fiscalía este domingo. La seguridad en las comisarías del país se ha reforzado.

El primer ministro belga, Charles Michel, apuntó horas después del suceso que los primeros indicios apuntaban a un acto terrorista, y la fiscalía ha informado hoy de que el agresor ha sido identificado como K. B., argelino de 33 años fichado por la policía por delitos comunes no relacionados con el terrorismo y residente en Bélgica desde 2012.

El presunto terrorista portaba consigo una mochila donde guardaba el machete, que fue inspeccionada por los servicios de desactivación de explosivos sin que se encontraran armas en su interior. La investigación sobre los hechos sigue en curso y la policía ha registrado durante la noche dos viviendas en Charleroi en busca de nuevas pruebas. La ciudad, que forma parte de la región francófona de Valonia y cuenta con una población que supera los 200.000 habitantes, fue una de las localidades elegidas por los yihadistas que atacaron París el 13-N para preparar los atentados.

De confirmarse oficialmente el móvil terrorista, el ataque de este sábado sería el primer atentado que sufre Bélgica desde los que golpearon el país el pasado 22 de marzo, en los que fallecieron 32 personas y centenares resultaron heridas en el aeropuerto y el metro de Bruselas. Desde entonces la policía ha llevado a cabo numerosas redadas, la última hace poco más de una semana, cuando las fuerzas de seguridad detuvieron a Nourredine H., de 33 años, acusado de planear un atentado.

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Sobre la firma

Álvaro Sánchez
Redactor de Economía. Ha sido corresponsal de EL PAÍS en Bruselas y colaborador de la Cadena SER en la capital comunitaria. Antes pasó por el diario mexicano El Mundo y medios locales como el Diario de Cádiz. Es licenciado en Periodismo por la Universidad de Sevilla y Máster de periodismo de EL PAÍS.

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