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Etiopía culpa a Egipto y Eritrea de “financiar y armar” la revuelta de los oromo

Merkel visita el país, en estado de emergencia tras la muerte de decenas de personas por la represión

Protesta de los oromo contra el Gobierno etíope, el 2 de octubre en Bishoftu.
Protesta de los oromo contra el Gobierno etíope, el 2 de octubre en Bishoftu.ZACHARIAS ABUBEKER (AFP)
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El Gobierno etíope ha acusado a grupos de Egipto y Eritrea de alimentar y participar en las manifestaciones en su territorio, donde ha decretado el estado de emergencia para frenar las protestas en la región de Oromia, al suroeste del país. Allí han muerto decenas de personas en la última semana. Los manifestantes de esta zona protestan contra la persecución del movimiento independentista oromo. La canciller alemana, Angela Merkel, viaja este martes a Etiopía, y su visita estará marcada por la ola de violencia en el país. La canciller ha afirmado que Etiopía debe permitir las protestas y que la policía debe responder de forma proporcionada. El primer ministro, Hailemariam Desalegn, ha negado que los agentes hayan empleado tácticas violentas contra los manifestantes. 

Las protestas de los oromo comenzaron el pasado noviembre. Constituyen el grupo étnico más numeroso del país y el este de África y suponen más de un tercio de los 100 millones de ciudadanos etíopes. Pero han sido marginados y discriminados por los sucesivos Gobiernos etíopes. Acusan al actual Ejecutivo de perseguirles de manera injustificada y demandan más autogobierno, presencia en las instituciones políticas etíopes y una redistribución de la riqueza. Las revueltas también se han extendido a los pueblos de mayoría amhara, una etnia que representa el 27% de la población etíope y que acumula unas reivindicaciones históricas muy similares a las de los oromo. Desde el pasado noviembre, más de un millar de personas han perdido la vida. Y el régimen autoritario etíope afronta un movimiento de oposición al Gobierno sin precedentes en los últimos años.

El portavoz del Ejecutivo etíope, Getachew Reda, aseguró este lunes que tienen pruebas de que el Frente de Liberación Oromo —que el Ejecutivo ha incluido en su lista de grupos terroristas— ha estado recibiendo apoyo de Egipto. "Tenemos suficientes pruebas de que han recibido entrenamiento y financiación de Egipto", afirmó Getachew Reda en una rueda de prensa, donde precisó que las acusaciones no son contra el Gobierno egipcio, sino contra grupos que operan en el país. En palabras de Reda, "hay todo tipo de elementos en la clase política egipcia que pueden o no estar vinculados directamente con el Gobierno egipcio".

El Ejecutivo etíope también acusó a grupos de Eritrea de armar, entrenar y financiar esta ola de protestas. Ambos países mantienen una larga disputa territorial que se remonta a la guerra en la que se enfrentaron entre 1998 y 2000, y en numerosas ocasiones Etiopía ha acusado al país vecino de apoyar a grupos armados opositores a su Gobierno para "desestabilizar la paz y el progreso económico".

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Las protestas se han intensificado en Etiopía durante la última semana, después de que el pasado 2 de octubre al menos 52 personas perdieran la vida en una estampida provocada por una intervención policial durante un festival tradicional de los oromo en el que se escucharon algunas proclamas antigubernamentales. Los grupos de manifestantes también han provocado importantes daños en un centenar de instituciones públicas y empresas privadas, entre ellas negocios extranjeros. 

Angela Merkel y Hailemariam Desalegn, este martes en Adís Abeba.
Angela Merkel y Hailemariam Desalegn, este martes en Adís Abeba.Mulugeta Ayene (AP)

"Ahora Etiopía se enfrenta a una amenaza de seguridad totalmente diferente, con bandas que están recibiendo armas, entrenamiento y financiación de fuerzas extranjeras", aseveró el portavoz del Ejecutivo. En consecuencia, explicó Reda, las medidas de seguridad normales son "extremadamente deficientes", por lo que el Gobierno ha decidido decretar el estado de emergencia en el país durante un periodo de seis meses.

En estos seis meses, el gobernante Frente Revolucionario Democrático del Pueblo Etíope iniciará un diálogo político con organizaciones de la sociedad civil y partidos de la oposición, como han reclamado recientemente, aseguró el primer ministro etíope, Hailemariam Desalegn. Actualmente, la oposición no tiene representación parlamentaria en el país. 

La Unión Europea ha instado a Etiopía a respetar plenamente los derechos humanos durante el estado de emergencia y ha urgido a los etíopes a abrir un diálogo inclusivo y a restaurar la calma. "La suspensión de los derechos políticos y democráticos debe evitarse", declaró este lunes el Servicio Europeo de Acción Exterior en un comunicado. 

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