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RADIOGRAFÍAS AMERICANAS
Columna
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Una traición diplomática

Ruiz Cabañas debería ser despedido y Römer, reinstalado en su cargo

La semana pasada se votó en la Unesco una propuesta que ponía en duda la vinculación entre el judaísmo y el Muro de las Lamentaciones. Borrar todo rastro de conexión judía con Jerusalén, se podría aducir, equivale a desvincular la catedral metropolitana de la Ciudad de México con los católicos o la Gran Muralla con los chinos. ¡Una barbaridad! ¿Habrán muerto de golpe todos los diplomáticos mexicanos? No, claro que no, conozco a muchos que me distinguen con su cálida y talentosa amistad, sólo que en la cancillería existe un traidor de muy alto nivel que ignora las instrucciones vertidas por el mismísimo jefe del Estado mexicano. Me explico: Ayer, Miguel Ruiz Cabañas, subsecretario para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Cancillería, conocido antisemita, compareció en un famoso noticiero radiofónico y reconoció públicamente que el presidente Peña Nieto había ordenado la ¡abstención! en la votación de la Unesco. La instrucción, según la entrevista, no podía ser más clara.

¿Qué sucedió? El voto mexicano, sin embargo, fue a favor contraviniendo las instrucciones presidenciales. ¿Explicaciones inútiles de Ruiz Cabañas al aire? Que Andrés Römer, el embajador mexicano ante la Unesco no había informado "correctamente sobre el contexto de la votación... Le habíamos dicho que se acercara a los países europeos para ver cuál era el sentido de su posición; pero si no había ningún cambio en la información que él tenía, podía votar como se ha votado en ocasiones anteriores", es decir, a favor de Palestina, o lo que es lo mismo, en contra de las instrucciones presidenciales y a favor de la agenda personal antisemita del subsecretario de marras. ¿Quién manda finalmente en México?

¿En resumen?: no solo no se le dio a Römer la orden directa de abstenerse, sino que se le instruyó en términos ambiguos que "votara en el mismo sentido". México había votado en 12 ocasiones en contra del Estado de Israel, ese era "el mismo sentido". ¿Es claro? ¿Consecuencias? A Römer se le acusa de no haber informado con cómo votarían el resto de los países, pero al mismo tiempo se le condena por haber revelado el sentido del voto mexicano al embajador de Israel. Es decir, el subsecretario le indicó que fungiera como espía para conocer la postura de otras naciones sin advertirle que ese intercambio de información era una violación a la Ley de Relaciones Exteriores. ¿Por qué ordenarle a Römer conocer otras posturas si existía una línea presidencial? ¿No es evidente que fue el chivo expiatorio de Ruiz Cabañas? ¿Así es la diplomacia mexicana? ¿Who the hell is in charge?

Estados Unidos, Alemania y el Reino Unido votaron, claro está, en contra de semejante resolución, pero Ruiz Cabañas, pasando por alto la instrucción presidencial, logró que se votara en conjunto con la comunidad árabe. Römer hizo que se respetara la voluntad de la "cancillería", pero se manifestó públicamente en contra de la resolución, al levantarse y abandonar el recinto. Römer fue despedido injustamente. ¿Cuál tenía que haber sido la conducta honorable de Ruiz Cabañas? Reconocer que, como subsecretario ignoró las instrucciones presidenciales y ordenó un espionaje indebido. Era más fácil echar a Römer por judío y porque alguien tenía que pagar los platos rotos, ¿no...?

"El hijo de un refugiado de la Europa nazi, Römer se pronunció por principio al negarse a alzar la mano por lo que era un intento deliberado de reescribir la historia", publicó el New York Post. "El embajador mexicano Andrés Römer se salió durante el voto en París. Römer, judío, aparentemente no pudo apoyar una resolución que negara los lazos judíos con el Monte del Templo", fue el enfoque de CBN News. "Es un héroe. Por consciencia se negó a ejecutar la instrucción de su gobierno para apoyar la alarmante resolución, uno de sus delegados emitió el voto", se leyó en el portal UN Watch.

Si existiera la justicia (¿qué es eso?), Ruiz Cabañas debería ser el despedido, no solo por haber desconocido las instrucciones presidenciales, sino por haber inducido al espionaje a un notable diplomático mexicano. ¿Römer? Él tendría que ser reinstalado en el cargo. ¿Justicia...?

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