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El FBI empieza a analizar los correos de la mano derecha de Hillary Clinton

La campaña demócrata pide que difunda sus investigaciones sobre la afinidad de Trump con Rusia

Huma Abedin, la mano derecha de Clinton.Foto: reuters_live | Vídeo: PAUL J. RICHARDS (AFP) / REUTERS-QUALITY

Con el tiempo en contra y bajo una enorme presión, el FBI inició este lunes su análisis de los correos electrónicos de la mano derecha de Hillary Clinton. El objetivo de los agentes es determinar si los documentos de la asesora Huma Abedin contienen información clasificada y si son nuevos respecto a los cerca de 30.000 ya examinados en la investigación inicial al servidor privado de email que utilizó Clinton como secretaria de Estado. El hallazgo de nuevos correos podría poner en aprietos a Clinton o Abedin si se demuestra que trataron de ocultar información a los investigadores. O de lo contrario, si no aparece nada nuevo, pincharía las expectativas de una gran revelación.

En el terreno político, a una semana de las elecciones presidenciales, la campaña de Clinton mantuvo su ofensiva contra el director del FBI, James Comey, al que pidió mayor transparencia y que también difunda las investigaciones de la agencia sobre la afinidad del republicano Donald Trump con el entorno del presidente ruso, Vladímir Putin. En un mitin en Ohio, la candidata demócrata se exculpó de cualquier irregularidad. “No hay ningún caso aquí”, dijo en alusión a las nuevas pesquisas a sus correos.

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El FBI no ha encontrado por ahora ningún vínculo directo o concluyente entre Trump y el Gobierno ruso tras meses de pesquisas, según funcionarios policiales citados este lunes por el diario The New York Times. Comey declinó en septiembre en una comparecencia en el Congreso responder a una pregunta sobre si existía una investigación al entorno del candidato.

En un acto en Michigan, el candidato republicano mantuvo sus elogios a Comey y confío en que en la nueva investigación se encuentre lo que describió como la “veta principal” de una mina: los 33.000 correos que el equipo de Clinton borró de su servidor privado al considerarlos personales cuando el Departamento de Estado pidió el registro de las comunicaciones de la jefa de la diplomacia estadounidense, entre 2009 y 2013.

Personal del FBI empezó a cargar los correos de Abedin en un programa informático especial que les permitirá discernir qué mensajes ya fueron analizados previamente y si contienen información confidencial, según fuentes oficiales citadas por medios estadounidenses. Se desconoce si los agentes llegarán a alguna conclusión antes de las elecciones del 8 de noviembre.

El inicio de la revisión de los documentos es un capítulo más en el culebrón político desatado el pasado viernes por el director del FBI al anunciar que la agencia había hallado nuevos correos que podrían estar relacionados con su investigación cerrada sobre el servidor de Clinton como secretaria de Estado. El FBI encontró esos correos en un ordenador de Anthony Weiner, el marido separado de Abedin, en el marco de la investigación al excongresista por enviar mensajes de contenido sexual a una menor.

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El FBI cerró en julio la investigación a Clinton, lo que llevó al Departamento de Justicia a no presentar cargos judiciales contra la demócrata al no hallar nada delictivo en sus correos. Los investigadores encontraron mensajes clasificados en el servidor de Clinton pero la exoneraron de haberlos enviado intencionadamente, lo que supondría un delito.

En una conferencia telefónica con periodistas, Robby Mook, el jefe de campaña de la demócrata, acusó al director del FBI de un “doble estándar” entre Clinton y Trump.

El detonante fue una noticia de la cadena CNBC que sostiene, citando a un exfuncionario del FBI, que Comey argumentó en contra de que el Gobierno estadounidense acusara oficialmente a Rusia del robo de información incómoda para Clinton. El director se opuso por la cercanía de las elecciones, según esa información. La acusación oficial se realizó hace tres semanas. Washington alega que Moscú trata de ayudar a Trump en los comicios con el robo de información que ha ido publicando el portal Wikileaks.

La petición del equipo de Clinton llega al día siguiente de que el líder demócrata del Senado, Harry Reid, mandara una carta a Comey en la que sugería que quiere ayudar electoralmente al republicano y esgrimía, sin presentar pruebas, que el FBI mantiene oculta “información explosiva” sobre supuestos lazos entre los entornos de Trump y Putin.

Entre ambos frentes, de quienes defienden y critican el anuncio de Comey, trató de situarse este lunes la Casa Blanca. El portavoz Josh Earnest dijo que el presidente Barack Obama tiene una opinión “muy elevada” de Comey y que el director está en una “posición difícil”. Pero sugirió que debería haber seguido las directrices del Departamento de Justicia, del que depende el FBI, que recomiendan no comentar investigaciones en curso ni interferir en el proceso electoral. Es decir, que debería haber evitado propiciar un incendio del que se sabe muy poco pero que durará hasta el día de la votación.

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