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La CIDH investiga posible tortura en 60 detenidos por el caso Ayotzinapa

La comisión presentó un plan de trabajo para dar seguimiento a las medidas que adopte el Gobierno mexicano a fin de aclarar el paradero de los estudiantes

Manifestación en México por Ayotzinapa (imagen de archivo).
Manifestación en México por Ayotzinapa (imagen de archivo).MARCO UGARTE (AP)

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) dio a conocer que de 80 detenidos por la desaparición de los 43 jóvenes ocurrida en Guerrero en septiembre de 2014, más de 60 presentaban lesiones corporales. Durante la presentación del plan de trabajo del mecanismo de seguimiento a la medida cautelar emitida por el caso Ayotznapa, el presidente de la CIDH, James Cavallaro, insistió en que los estudiantes no fueron quemados en el basurero de Cocula e instó a las autoridades a continuar con las investigaciones. "La principal deuda que tiene el Estado con los estudiantes, sus familiares, y la sociedad toda, es investigar hasta establecer la verdad de los hechos", afirmó Cavallaro. 

El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) había advertido en su último informe presentado en abril que numerosos partes médicos recogían lesiones físicas en casi 80% de los detenidos La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) también investiga estas denuncias. En abril pasado el organismo informó que abrió 4 expedientes de queja por posible maltrato, 11 por detención arbitraria y 47 por la comisión de posibles actos de tortura. La CIDH ha anunciado que dará seguimiento a la hipótesis de la tortura.

Desde el 3 de octubre de 2014, la CIDH solicitó al Estado mexicano determinar el paradero de los 43 estudiantes desaparecidos como parte de las medidas cautelares que emitió en torno al caso. Dos años después no se ha cumplido la petición. Por ello el mecanismo dará seguimiento y supervisará las medidas que adopte el Gobierno a fin de dar cumplimiento a las recomendaciones señaladas en los dos informes del GIEI. "Esto incluye la necesidad de avanzar en la búsqueda de la verdad y justicia en este caso", se detalló en un comunicado. 

El relator de la CIDH para México y coordinador del mecanismo de seguimiento, Enrique Gil Botero, recordó que hay recomendaciones hechas por el GIEI que están pendientes de llevarse a cabo.  "Abarca desde las limitaciones y obstrucciones que enfrentó la investigación, la ausencia de medios tecnológicos en las búsquedas de los desaparecidos, la falta de atención adecuada a los familiares, la revictimización, y las deficiencias de los informes médicos realizados a las personas detenidas tras las denuncias de haber sido torturadas", precisó.

James Cavallaro destacó que otras de las diligencias pendientes de realizar por las autoridades mexicanas son las entrevistas a los elementos militares del 27 Batallón de Infantería, con sede en Iguala. Se sabe que durante el 26 y 27 de septiembre los militares adscritos a esa zona monitorearon cada paso de los normalistas. Incluso uno de los soldados infiltrados presenció la agresión a uno de los autobuses y tomó fotografías del hecho. Pese a que observaron la cacería que emprendieron los policías municipales, los militares se mantuvieron pasivos.

A dos años de la desaparición de los estudiantes de Ayotzinapa aún no se sabe claramente qué ocurrió con los jóvenes. Sus padres han acusado que la investigación hecha por la Procuraduría General de la República (PGR, Fiscalía) está plagada de irregularidades y continúan la búsqueda de sus hijos por todos los rincones del país. Pese a que han sido detenidas 130 personas –entre sicarios, cómplices o asociados del grupo criminal Guerreros Unidos, así como policías de Iguala y Cocula– la desconfianza de las familias en las autoridades se ha profundizado.

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