_
_
_
_
_

Maduro prorroga por 72 horas más el cierre de la frontera con Colombia

El presidente de Venezuela acorta de diez a cinco días el plazo para canjear los billetes de 100 bolívares en la sede del Banco Central

Maduro sostiene un billete de 20.000 bolívares.
Maduro sostiene un billete de 20.000 bolívares.EFE

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha decidido prorrogar por 72 horas el cierre de la frontera con Colombia, para terminar de golpear, según dijo, a las mafias del país vecino que, en su criterio, han provocado la caída del poder de compra del bolívar, la moneda local, durante el último mes.

El gobernante venezolano también ha decidido acortar de 10 a cinco días el plazo para que el Banco Central de Venezuela (BCV) reciba los inutilizados billetes de 100 bolívares a las personas naturales y jurídicas que no pudieron depositarlos en la banca local entre el martes y el jueves, cuando culminó el plazo. El BCV solo tiene dos sedes (Caracas y Maracaibo, en el occidente). El operativo que supone recibir en tan pocos días a tantas personas ha impuesto la necesidad de habilitar cajeros para atender la demanda del canje.

Se trata de la continuación de la saga que mantiene en ascuas a los venezolanos, cuya vida diaria se ha visto aún más limitada con la decisión tomada por el régimen de sacar de circulación el billete de mayor denominación en la economía local. Este jueves casi en ningún banco aceptaba solicitudes de retiro argumentando que no tenían suficientes billetes de Bs.50, la pieza de mayor denominación a la espera de la entrada en circulación de las denominaciones de Bs. 500, 1.000, 5.000, 10.000 y 20.000, para entregárselos al cliente. En algunas agencias estaban dispuestos a entregar el dinero solicitado, pero en presentaciones de Bs. 5 y Bs.2. La cantidad de papel moneda que supone pagar con billetes de tan baja denominación convierte en una misión imposible el manejo de efectivo por estos días en Venezuela.

Maduro enseñó en una breve alocución transmitida por la cadena oficial el nuevo cono monetario y prometió que en las próximas tres semanas serían incorporados como forma de pago. De momento, los venezolanos lucen resignados a pagar los servicios con tarjetas de débito o de crédito. La solución es profundamente discriminatoria porque la mitad de la población no está bancarizada. Además, no hay punto de venta en estaciones de gasolina, ni en las unidades de caótico transporte público, taxis, estacionamientos (parqueaderos) o pequeños abastos.

Después de la decisión tomada por Maduro el domingo, el dólar en el mercado negro cayó desde unos 4.200 bolívares hasta 2.480 bolívares. Al sacar de circulación la mitad de los billetes y cerrar la frontera se ha reducido la demanda de dólares. Loa economistas coinciden en que la caída no podrá sostenerse en el tiempo. Cuando los nuevos billetes se incorporen al torrente de la economía los venezolanos buscarán protegerse de la devaluación adquiriendo una moneda verdaderamente fuerte.

La medida, además, llega también en el mes donde la actividad comercial se incrementa y los canales electrónicos suelen saturarse. El caos en el que se ha convertido Venezuela, que sacó de circulación la mitad de su dinero en efectivo, no tiene parangón en la historia reciente y trae de mal humor a los venezolanos, que por estos días suelen olvidarse de todo para dedicarse

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_