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Las mentiras sobre Europa de Marine Le Pen

La candidata del Frente Nacional manipuló datos y realizó afirmaciones falsas durante el debate presidencial con Macron

Marine Le Pen durante el debate televisado de la noche del miércoles.Vídeo: STRINGER (AFP) / REUTERS-QUALITY
Silvia Ayuso
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Además de su dureza dialéctica, el debate presidencial entre los candidatos al Elíseo Marine Le Pen y Emmanuel Macron estuvo marcado, la noche del miércoles, por abundantes medias verdades, falsedades totales y acusaciones sin fundamento lanzadas, principalmente, por la líder del Frente Nacional (FN). Buena parte de sus falsas afirmaciones se refirieron a la Unión Europea, uno de los objetivos de la candidata eurófoba del partido de extrema derecha.

“La Unión Europea le cuesta a Francia 9.000 millones de euros”

Falso. Es cierto que Francia es un contribuyente neto a la UE, pero esa cifra es errónea y la afirmación está también falseada.

Según los últimos datos oficiales disponibles, de 2015, Francia contribuyó al presupuesto de la UE con 19.000 millones de euros, pero recibió, como “uno de los principales beneficiarios” del mismo, 14.500 millones de vuelta, lo que reduce la contribución neta gala a 4.500 millones, según los cálculos de la Comisión Europea. El Gobierno francés, que incluye otros costos, estima la contribución neta francesa en 6.100 millones, cifra que en todo caso está lejos de la manejada por Le Pen.

Además, Francia es el principal beneficiario (9.000 millones de euros) de las ayudas europeas a la agricultura, lo que le permite “ser el principal exportador a países fuera de la UE” en este ramo, según recordó la representación de la Comisión Europea en París a finales de abril, justamente cuando Le Pen empezó a utilizar esas cifras manipuladas. El cálculo de coste-beneficio no es además tan sencillo como afirma la candidata eurófoba, ya que, como recordó la Comisión en ese momento, el bloque permite el acceso a 500 millones de consumidores, en vez de limitarlo a los 66 millones de franceses. Y un dato más: el 60% de las exportaciones francesas se realizan dentro de la UE, lo que significa, más allá del volumen de negocios, 3,2 millones de empleos vinculados a este sector solo en Francia.

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“La economía británica nunca fue mejor que desde que los británicos decidieron recuperar su libertad”

Le Pen afirmó que desde el Brexit, la economía británica ha mejorado, en un intento de argumentar que la salida de Francia de Europa y del euro solo beneficiará al país, en vez de provocar el caos económico, tal como afirman políticos, economistas y empresarios. Lo que Le Pen no dijo es que, por una parte, Reino Unido nunca estuvo en el euro, por lo que ambos países y situaciones no son estrictamente comparables.

Aunque el Fondo Monetario Internacional (FMI) revisó al alza el mes pasado sus perspectivas para Reino Unido y reconoció que “la evolución ha sido mejor de lo esperado desde la votación”, para salir de la UE, en junio de 2016, también advirtió de que tarde o temprano se sentirán “los efectos negativos de esa decisión”, en forma de depreciación de la libra y aumento de la incertidumbre que podría afectar a las inversiones y el consumo. De hecho, en el primer trimestre de 2017, la economía británica ya ha sufrido un frenazo con respecto del último trimestre de 2016: creció 0,3% del PIB, frente al 0,7% en los tres últimos meses del año pasado.

“De 1993 a 2002, todas las grandes empresas francesas podían pagar en euros”

En sus intentos por suavizar su propuesta de salir de euro, ampliamente impopular entre la población francesa, Le Pen ha dado un confuso giro en los últimos días de campaña, prometiendo entre otras cosas que esa cuestión no será una prioridad. Además, ahora dice que lo que quiere hacer es una transición “de la moneda única a la moneda común” para ciertas transacciones internacionales, mientras que los franceses podrán usar de nuevo una moneda propia, el franco. Para mostrar la factibilidad de esta propuesta, Le Pen dijo en el debate que esa “moneda común” ya existió y se aplicó antes de la implantación de euro. La candidata del FN se refiere visiblemente al Ecu, el germen de unidad monetaria europea que sirvió como referencia en los años 90 del siglo pasado hasta la implantación del euro. Pero no se trataba, como dio a entender Le Pen, de una moneda contante y sonante, sino que era una media ponderada de las monedas participantes, una especie de canasta de monedas que tampoco se utilizó, como afirmó, para transacciones con privados y que además seguía permitiendo fluctuaciones, mientras que el Euro fijaba una equivalencia única. La fórmula de dos monedas que parece proponer ahora Le Pen dependería además de la aquiescencia de los demás socios de la eurozona, algo altamente improbable.

“Con el euro, el poder de compra de los franceses ha disminuido”

Según Le Pen, la entrada del euro provocó un “aumento espectacular de los precios”, lo que ha tenido como consecuencia una disminución del poder de compra de los franceses. Pero varios medios recuperan ahora las cifras oficiales del INSEE, el Instituto Nacional de Estadísticas, que demostrarían que el aumento del IPC ha sido una constante desde los años 90 y que el euro no provocó una subida brusca, como sostiene la candidata del FN.

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Sobre la firma

Silvia Ayuso
Corresponsal en Bruselas, después de contar Francia durante un lustro desde París. Se incorporó al equipo de EL PAÍS en Washington en 2014. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, comenzó su carrera en la agencia Efe y continuó en la alemana Dpa, para la que fue corresponsal en Santiago de Chile, La Habana y Washington.

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