'Lo que Colombia necesita es restaurar la autoridad y la ley'
El periodista Francisco Santos, ex editor del diario El Tiempo, de Bogotá, anunció ayer por sorpresa que aspira a la vicepresidencia de Colombia en la candidatura que encabeza el disidente liberal Álvaro Uribe. Santos (Bogotá, 1960) fue secuestrado durante siete meses por el cartel de Medellín a principios de los años noventa y esa experiencia le llevó a fundar País Libre, una organización de asistencia a las víctimas de secuestros que convocó marchas multitudinarias en todo Colombia para llamar la atención sobre el problema. A principios de 2000 abandonó su país tras desvelarse un plan de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para asesinarlo y desde entonces trabajaba en la redacción de EL PAÍS.
'En Madrid veía cómo Colombia se iba deshaciendo y me sentía como un león enjaulado', manifestó ayer en una conversación telefónica tras anunciar oficialmente su candidatura en Bogotá. Santos rechaza las acusaciones de 'guerrerismo' lanzadas contra Uribe, cuyas promesas de mano dura contra la guerrilla se han convertido en el tema central de la campaña electoral, y asegura que se identifica 'plenamente' con el programa político del gran favorito a la victoria en las elecciones presidenciales del próximo 26 de mayo.
'Uribe se ha comprometido a restaurar la autoridad y la ley', sostiene Pacho Santos. 'Es muy fuerte en ese sentido y es lo que Colombia necesita en este momento'. Uribe, afirma su compañero de candidatura, 'no cierra las puertas a la negociación' con los insurrectos, pero exige dos condiciones para retomar el diálogo: una tregua unilateral y un cese de las hostilidades. El presidente de Colombia, Andrés Pastrana, decidió el pasado 20 de febrero romper las negociaciones con las FARC, que días después secuestraron a Ingrid Betancourt, candidata presidencial del movimiento Oxígeno Verde.
En caso de victoria electoral, Uribe ha pedido a Santos que se encargue, como vicepresidente, de cuestiones relacionadas con la defensa de los derechos humanos y la lucha contra los secuestros y la corrupción política. 'El país necesita que todos metamos el hombro', sostiene el periodista convertido en político, quien asegura que Uribe es un candidato 'honesto, claro y sin tacha que demostró como gobernador de Antioquia que cumple lo que promete y que tiene una propuesta social muy agresiva para construir viviendas sociales, aumentar la cobertura sanitaria y mejorar la educación'.
El anuncio de la candidatura de Santos no ha sentado nada bien en su antiguo periódico, El Tiempo, propiedad de su familia. Sus responsables se mostraron ayer desconcertados por su decisión y temerosos de que el paso a la política de uno de los suyos lesione la independencia del diario. 'Cerré una puerta que no tiene regreso', reconoce el propio Santos, quien, en cumplimiento de los estatutos de El Tiempo, no podrá trabajar de nuevo en su redacción. 'Entiendo que se molesten, pero aspiro a restaurar los lazos maltrechos en el futuro'.
