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Análisis:REVUELTA EN BOLIVIA
Análisis
Exposición didáctica de ideas, conjeturas o hipótesis, a partir de unos hechos de actualidad comprobados —no necesariamente del día— que se reflejan en el propio texto. Excluye los juicios de valor y se aproxima más al género de opinión, pero se diferencia de él en que no juzga ni pronostica, sino que sólo formula hipótesis, ofrece explicaciones argumentadas y pone en relación datos dispersos

El gas, un catalizador del descontento

Las movilizaciones sociales en Bolivia parecen ser realizadas sólo contra la exportación del gas, pero en realidad el gas es solamente el catalizador del descontento de la población contra un modelo económico que en dos décadas no alivió la pobreza y que, por el contrario, amplió las brechas entre pobres y ricos y no solucionó los problemas de exclusión económica y social de la mayoría de la población; además, es una expresión de descontento contra un modelo político muy permisivo con la corrupción y el uso clientelar, patrimonial y prebendal de la Administración pública por parte de todos los partidos políticos que accedieron al Gobierno; es la reacción de la población contra partidos que no pensaron en el país, sino en los intereses de sus militantes.

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La memoria larga de los bolivianos recuerda que ninguna exportación de recursos naturales (plata, caucho, estaño, petróleo) solucionó los problemas de los pobres y no abrió espacios de industrialización de la economía boliviana; esa memoria brota con más fuerza en un contexto social de radicalidad social y de movimientos antiglobalización y anticapitalismo que se extienden en América Latina.

Pero más allá de esa razón de fondo, en el ámbito de la economía se precisa conocer que Bolivia exportaba 1.000 millones de dólares en 1980, en tanto que en 2003 exporta sólo 1.300; pero importa 1.800, por tanto, posee un déficit comercial de cerca de 500 millones de dólares anuales. El 80% de su inversión pública es financiada por cooperación internacional, en un contexto en el cual se secan las fuentes de créditos concesionales para Bolivia que marcan un camino de viabilidad económica difícil para la nación. Por tanto, la posibilidad de exportación de gas boliviano a California era de una enorme importancia, pues habría permitido duplicar las exportaciones en 2007 y así dotarle de viabilidad económica al país. Cortar la posibilidad de exportación de gas tendrá costos económicos muy altos.

Una decisión negativa para exportar gas, causada ya sea por la falta de información gubernamental sobre el tema o por los brotes de radicalidad política y social, aumenta el riesgo país e influirá negativamente en la obtención de recursos de inversión externa para Bolivia.

La crisis del sistema político, del sistema de partidos, de la democracia y la consecuente inestabilidad política generada pueden erosionar la estabilidad económica y herir las posibilidades de viabilidad económica del país. Bolivia precisa producir y exportar para vivir, pero debe hacerlo en acuerdo con su población, dando señales de que tan importante como el mercado externo son también las necesidades del mercado interno, esto es, de la gente. Es esto lo que espera la población para poder tener viabilidad hacia el futuro.

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