_
_
_
_
_

Miles de georgianos exigen la salida de su presidente frente a la sede del Gobierno

La oposición acusa a Shevardnadze de fraude en los comicios del pasado día 2

Decenas de miles de personas se han lanzado a la calle en Tbilisi, capital de la república ex soviética de Georgia, llamados por los grupos de oposición al presidente Eduard Shevardnadze, al que se acusa de fraude en las elecciones del pasado día 2. Los manifestantes, unos 20.000, se han dirigido a la sede de la presidencia, pese a la advertencia del presidente sobre el peligro de que se desate "una guerra civil".

Más información
Rusia teme que la crisis en Georgia desemboque en una guerra civil
Shevardnadze lidera el recuento electoral en Georgia
Una protesta opositora en Georgia es disuelta a tiros
Shevardnadze decreta el estado de emergencia en Georgia tras el asalto al Parlamento
Los sondeos otorgan una victoria abrumadora a Saakashvili en las elecciones de Georgia

La oposición georgiana ha pasado a la acción para la conquista del poder y ha abandonado las negociaciones. Así, ha lanzado a sus partidarios a la calle en una campaña de desobediencia civil para exigir la dimisión del presidente y la convocatoria de nuevas elecciones. Al grito de "traidor" y "dimisión", los manifestantes han rodeado la sede de la presidencia. Aunque los manifestantes han prometido limitarse a una "acción pacífica", el Ministerio del Interior afirma tener datos de que opositores armados pueden causar disturbios y "lanzarse al asalto" de la Cancillería de Estado, la sede de la Presidencia.

Ante ello, el Gobierno ha desplegado unidades antidisturbios en los accesos a la Presidencia y su titular, Koba Narchemashvili, ha advertido de que no dudará en "utilizar la fuerza" si los manifestantes intentan romper el triple cerco policial.

Lo ha robado todo

"Hoy o mañana, el presidente tendrá que marcharse", ha afirmado Mijail Saakashvili, líder del nacionalista Movimiento Nacional, que encabeza las protestas callejeras y la oposición a Shevardnadze. "Este hombre nos lo ha robado todo y no piensa tener en cuenta a su propio pueblo", ha clamado Saakashvili ante la multitud. "No vamos a tomar la Cancillería, pero quiero que nos acerquemos para que oigan nuestros gritos". Aunque el líder de la oposición opina que Shevardnadze puede "compartir la suerte de (Nicolae) Ceaucescu", el dictador rumano fusilado tras el levantamiento popular de 1989, la concentración se ha disuelto al cabo de unas horas sin derramamiento de sangre, eso sí, con una tras llamada al Ejército a "desobedecer al presidente" y a los empresarios a no pagar sus impuestos "hasta que se vaya este régimen".

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Shevardnadze, por su parte, se aferra al cargo y ha anunciado que no dimitirá: "Sería una falta de responsabilidad. Tampoco correré la suerte de Ceaucescu o el ex presidente yugoslavo Slobodan) Milosevic,". En medio de la grave crisis política desatada tras los recientes comicios parlamentarios, Shevardnadze ha advertido del peligro de una "guerra civil" y, en un mensaje televisivo, ha pedido a la población que se abstenga de asistir a las protestas.

"Estoy dispuesto a dialogar con quien sea, con tal de que no haya una guerra civil", ha dicho el presidente, anunciando que comicios volverán a celebrarse en 50 colegios donde hubo irregularidades. Aún así, ha enviado a Moscú para consultas a su aliado, el poderoso líder de la región autónoma de Adzharia, Aslán Abashidze, jefe de filas del partido Renacimiento, aliado del presidente y al que la oposición considera que prepara como sucesor.

Según datos oficiales aún no definitivos, los comicios dan la mitad de los escaños al bloque gubernamental Nueva Georgia y a su aliado, el partido Renacimiento de Abashidze. La otra mitad parecen tenerla asegurada los partidos de la oposición, unidos por el deseo común de desbancar a Shevardnadze pero divididos por sus discrepancias y rivalidades.

En la imagen, un grupo de manifestantes en la marcha hacia la sede de la presidencia.
En la imagen, un grupo de manifestantes en la marcha hacia la sede de la presidencia.AP

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_