Abbas anuncia un Gobierno de unidad nacional con Hamás para fin de mes

Miles de palestinos participan hoy en el acto de homenaje organizado en Ramala con motivo del segundo aniversario de la muerte del líder palestino por excelencia, Yasir Arafat, que durante 40 años encabezó la resistencia palestina contra Israel. En el acto ha participado el actual presidente palestino, Mahmud Abbas, que ha abogado de nuevo por un Gobierno de unidad nacional con Hamás y ha apuntado a que podría estar en marcha antes de fin de mes.

La ceremonia ha comenzado con la colocación de una corona de flores en la urna de cristal que cubre la tumba del histórico dirigente por parte de su sucesor, el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, que ha pronunciado un discurso. En él, no ha dejado pasar la oportunidad de referirse a la actualidad política. "Anuncio a nuestro pueblo buenas noticias, que hemos progresado mucho en el camino de establecer un Gobierno de unidad nacional que podría acabar con el embargo [económico occidental al Gobierno islamista de Hamás] y abrir el camino para la calma política", ha dicho Abbas. El presidente ha adelantado que "si Dios quiere, el Gobierno verá la luz antes del final de este mes".

Los enfrentamientos entre los partidarios de Hamás, el partido islamista radical -terrorista para EE UU y la UE- en el Gobierno, y los del partido Al Fatah, creado por Arafat y que ha dominado durante décadas la política palestina, han causado numerosos muertos en los pasados meses y han enturbiado mucho el clima político en los territorios. Además, la victoria de Hamás en las elecciones del mes de enero provocó el fin de las ayudas económicas que las potencias occidentales enviaban a los palestinos, por lo que la situación se ha tornado casi desesperada para la población. Por ello, Abbas ha pujado cuanto ha podido por la formación de un Gobierno de unidad que acabara tanto con los conflictos como con el embargo occidental.

Homenaje a Arafat

Una multitud de palestinos ha seguido el discurso de Abbas y las ceremonias de homenaje a Arafat, que han tenido lugar en el recinto de la mukata, la sede del Gobierno palestino, en la ciudad cisjordana de Ramala, donde Arafat estuvo confinado los últimos meses de su vida bajo la amenaza de muerte de Israel. Precisamente el recinto de la Autoridad Palestina, que el líder guerrillero contribuyó a poner en pie y que le sirvió de refugio y cuartel general, fue el lugar elegido para el entierro del rais palestino.

Altos cargos palestinos, entre ellos Mahumd Abbas, elegido presidente de la AP tras la muerte de Arafat, han depositado coronas de flores en la urna de cristal que recubre la tumba del histórico líder y han leído versículos del Corán, mientras una multitud de personas se congregaban en el patio cercano. Un gran retrato de Arafat presidía el acto, en el que han participado también cientos de invitados, entre ellos representantes de las distintas facciones palestinas, diplomáticos occidentales y diputados árabes de Israel.

Los asistentes han ido llegando en autobuses al centro de la ciudad y desde allí se han dirigido, enarbolando banderas palestinas y pancartas de Arafat, hacia la mukata.

El aniversario coincide con las negociaciones entre el partido Al Fatá de Abbas y el Movimiento de Resistencia Islámico (Hamás), en el Gobierno, para la formación de un Gobierno de unidad nacional.