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Fariñas, en estado grave pero estable tras una operación de urgencia

El disidente cubano tenía varios cálculos en la vesícula. - Los médicos temían complicaciones por su delicado estado de salud tras la huelga de hambre

El disidente cubano Guillermo Fariñas, que pasó más de cuatro meses en huelga de hambre para pedir la libertad de los presos políticos enfermos, fue operado ayer de urgencia para extirparle varios cálculos de la vesícula. Los médicos califican su estado como "grave pero estable", según la esposa de Fariñas, Clara Pérez. "La operación fue un éxito, por los temores sobre las complicaciones que podría tener, dado su estado de salud ", dijo.

"Guillermo fue operado de urgencia de la vesícula porque la tenía llena de cálculos, lo que le había provocado varias crisis, pero hoy tuvo varios vómitos, fuertes dolores en el abdomen y mucha inflamación", explicó su hermana Raisa Fariñas por teléfono desde la ciudad central de Santa Clara, donde reside el opositor y su familia.

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Según dijo Raisa Fariñas, su hermano fue intervenido a mediodía (noche en España) en el hospital Arnaldo Milián Castro, y los médicos indicaron que tras el proceso posoperatorio sería trasladado a la misma sala de terapia intensiva de ese centro, donde pasó la mayor parte de su última huelga de hambre y de sed.

Su hermana señaló que tras salr del hospital, el opositor había presentado al menos dos crisis vesiculares, pero "los médicos temieron operarlo porque ha estado recibiendo un tratamiento con anticoagulantes" para la trombosis en la vena yugular que contrajo durante la huelga.

Guillermo Fariñas estuvo en ayuno desde el pasado 24 de febrero, tras la muerte del opositor preso Orlando Zapata Tamayo a causa de una huelga de hambre de 85 días, y para exigir la liberación de los presos más enfermos.

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El psicólogo y periodista independiente de 47 años abandonó la huelga el pasado 8 de julio, después de que el Gobierno cubano anunciara su compromiso de liberar a 52 disidentes del Grupo de los 75, condenados en 2003, fruto de un inédito diálogo abierto en mayo pasado con la jerarquía de la Iglesia católica de la isla.

Hasta la fecha suman 28 los presos políticos de ese grupo liberados que han viajado a España siguiendo el proceso de excarcelaciones resultante de ese diálogo, que es apoyado por el Ejecutivo español.

El disidente cubano Guillermo Fariñas, en su casa de Santa Clara durante la huelga de hambre.
El disidente cubano Guillermo Fariñas, en su casa de Santa Clara durante la huelga de hambre.AFP

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