_
_
_
_
_

Medvédev anuncia una reforma política en Rusia tras las críticas internacionales

El presidente promete facilitar la presentación de candidaturas Modificará el sistema para una mayor representación territorial Rechaza la "injerencia del extranjero" en el país

El presidente ruso, en el discurso del estado de la nación.
El presidente ruso, en el discurso del estado de la nación.POOL (REUTERS)

El presidente de Rusia, Dimitri Medvédev, anunció este jueves que próximamente enviará un paquete de leyes para reformar el sistema político del país, en el que propone volver a las elecciones directas de los jefes regionales (gobernadores y presidentes de las repúblicas federadas), facilitar el registro de partidos y de candidatos a la jefatura del Estado y modificar el sistema electoral para garantizar que todas las provincias estén representadas en el Parlamento.

Entre las medidas que contemplará la reforma política anunciada, Medvédev propone eliminar la necesidad de recolectar firmas para participar en las elecciones parlamentarias y aumentar la representación de los partidos en la Comisión Electoral Central. También propuso crear de una auténtica televisión pública, sin influencia del Estado ni de los propietarios.

Medvédev hizo este anuncio durante su cuarto y último informe sobre el estado de la nación, ya que deberá abandonar el Kremlin después de las elecciones presidenciales de marzo próximo. En esos comicios, la victoria del primer ministro Vladímir Putin y su vuelta a la presidencia está prácticamente garantizada. Putin ya ha dicho que el jefe de Gobierno será Medvédev, con el que se intercambiará los papeles.

Al comenzar su discurso, Medvédev se refirió a las recientes elecciones parlamentarias de principios de diciembre, que recibieron contundentes críticas internacionales por las irregularidades detectadas por observadores. Estados Unidos dudó públicamente de la legitimidad del resultado. Medvédev, como ya hizo Putin en su momento, advirtió que no permitirá "la injerencia desde el extranjero".

"El derecho de la gente a expresar su opinión con métodos legales está garantizado, pero los intentos de manipular a los ciudadanos de Rusia, de engañarlos, de enardecer la discordia social son inadmisibles. No permitiremos que los provocadores y extremistas arrastrar a la sociedad a sus aventuras. Tampoco permitiremos la injerencia extranjera en nuestros asuntos internos", aseguró el presidente.

Miles de personas se echaron a las calles en Moscú para protestar por la manipulación de los resultados electorales, a pesar de la cual el partido gobernante Rusia Unida sufrió un fuerte descenso. El Gobierno reprimió duramente las manifestaciones y Putin afirmó que la oposición estaba manipulada por Estados Unidos.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Medvédev ha asegurado que respeta "cualquier crítica a las instituciones estatales y a los funcionarios". "Sacamos las conclusiones [pertinentes]: si la crítica es justa, restablecemos la legalidad allí donde ha sido violada, tomamos las decisiones necesarias después de consultar con las principales fuerzas políticas, expresamos nuestra posición y ojetamos cuando la crítica no tiene fundamos", señaló.

Pero después rechazar las críticas, Medvédev dijo que considera "un signo de maduración" de la democracia rusa el hecho de que "la sociedad cambia y los ciudadanos expresan más activamente su posición y presentean exigencias legítimas al poder". Es decir, que a juzgar por esta declaración, no tiene nada en contra de los mítines y que el previsto para este sábado para continuar las protestas contra las elecciones parlamentarias, que la oposición considera que fueron fraudulentas, podrá desarrollarse sin mayores contratiempos.

Medvédev pasó revista a sus cuatro años de gestión y enumeró lo que considera sus éxitos, entre los que destacó la reforma judicial, la situación económica y la modernización de las Fuerzas Armadas.

También se refirió, como ya es tradicional, al problema de la corrupción, y señaló que la lucha contra este mal, que debe ser "resuelta, sistemática y consecuente", está solo "en sus comienzos", y propuso nuevas medidas para tener un control más severo de los gastos de los funcionarios estatales.

En política exterior, el presidente subrayó que Rusia está dispuesta a continuar las negociaciones sobre el escudo nuclear así como "trabajar en un nuevo Tratado de Seguridad Europea".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_