_
_
_
_
_

El vicepresidente Biden defiende a Obama ante el 'lobby' afroamericano

El candidato republicano Mitt Romney se dirigió al foro el día anterior

El vicepresidente Joe Biden, durante su discurso ante la convención anual de la NAACP.
El vicepresidente Joe Biden, durante su discurso ante la convención anual de la NAACP.PAT SULLIVAN (AP)

El vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, sustituyó este jueves a Barack Obama en la conferencia anual de la NAACP, el ‘lobby’ afroamericano más importante del país. La ausencia de Obama, que alegó “problemas de calendario”, ha inspirado dudas sobre hasta qué punto puede confiar en obtener el mismo respaldo del voto de los afroamericanos que en las últimas elecciones, cuando el 95% de ellos apoyaron al candidato demócrata.

Obama puede confiar en que conseguirá la mayoría del voto afroamericano mientras que su rival, el candidato republicano Mitt Romney aspira a superar las cifras de John McCain en las presidenciales de 2008, cuando apenas rozó el 5% de los apoyos. Sin embargo, el descenso en intención de voto por parte de los afroamericanos, como indican encuestas recientes, puede costar la reelección al presidente. El vencedor de las elecciones presidenciales no es aquel que recibe la mayor suma de votos a nivel nacional, sino por sus victorias en cada uno de los 50 Estados de la Unión. Si Obama perdiera por pocos miles de votos en Florida, Virginia o Carolina del Norte porque no ha convencido a los afroamericanos como hiciera en 2008, Romney podría hacerse con la Casa Blanca.

Y es precisamente en aquellos Estados donde podría resonar además uno de los argumentos centrales ofrecidos por Romney el día anterior ante el mismo foro. “La tasa de desempleo, la duración del paro, la media de ingresos y la riqueza media de las familias son todos peores en la comunidad afroamericana”, defendió el candidato republicano. “Mientras que en el mes de junio la tasa de desempleo se mantuvo en un 8,2%, para los afroamericanos subió del 13,6% al 14,4%”.

Romney también se postuló como el mejor candidato para los intereses de los afroamericanos y Obama, con su ausencia, desaprovechó la oportunidad para dibujar el contraste entre ambos candidatos sólo 24 horas después. El presidente, que ya ofreció un discurso ante este influyente foro en 2008, cuando todavía era candidato, y en 2009, compareció esta vez a través de un breve vídeo. Obama se disculpó por no poder asistir en persona y prometió que seguiría trabajando “tan duramente como pueda, por la América que amamos”. El candidato demócrata instó a los ciudadanos a "perseverar y a trabajar juntos para salir de la recesión" y reiteró la importancia de reforzar la clase media e impulsar así la recuperación económica del país. Pero la defensa de sus políticas y de su candidatura a la reelección estaban en manos del vicepresidente.

El descenso en intención de voto por parte de los afroamericanos, como indican encuestas recientes, puede costar la reelección al presidente

Si las críticas a la reforma sanitaria, política insigne de la presidencia de Obama, costaron a Romney los abucheos de la audiencia, Biden decidió convertirla en uno de los ejes centrales de su comparecencia. "Él tenía razón, él tenía razón", dijo el vicepresidente en referencia a su superior, recordando que unos ocho millones de afroamericanos que carecían de seguro médico podrán obtenerlo ahora gracias a la nueva ley.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

"Creemos en un futuro en el que la cifra de niños afroamericanos que mueren por asma no sea cuatro veces superior a la de niños blancos", dijo Biden. “Desde el momento en que Obama juró el cargo en una fría mañana de enero, sólo ha hecho eso: poner las prioridades del país por encima de ninguna otra”. A partir de ahí, destacó algunas de las decisiones “más difíciles” del presidente, como el rescate de la industria del automóvil en 2009 o la operación que el 1 de mayo de 2011 acabó con la vida de Osama Bin Laden en Pakistán. “Algunas de esas decisiones no fueron fáciles, pero las tomó”.

El discurso de Biden estaba destinado a abrir la mayor distancia posible entre el candidato demócrata y su rival republicano, al que también atacó por defender políticas que eliminarían el acceso de las mujeres a la medicina preventiva y terminarían con programas como Planned Parenthood, la agencia que proporciona atención médica a mujeres sin recursos (un 14% de sus pacientes son mujeres negras, más de 400.000 cada año); o por intentar restringir los derechos de los norteamericanos, especialmente de las minorías, y criticó la política exterior del candidato republicano, basada, según Biden, “en la época de la Guerra Fría a pesar de que ese mundo ya no existe".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_