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Mitt Romney se queda solo en sus críticas a Obama

El candidato republicano a la presidencia critica la reacción inicial de la diplomacia de EE UU

Romney, al dar una conferencia en Reno, el lunes.
Romney, al dar una conferencia en Reno, el lunes. David Calvert (AFP)

En una semana en que las encuestas le dan como probable perdedor en las las elecciones presidenciales del 6 de noviembre, el candidato republicano a la presidencia, Mitt Romney, ha decidido romper con la unidad nacional respecto al ataque de un grupo de milicianos a la misión diplomática de EE UU en Libia, en el que murieron el embajador Chris Stevens y otros tres norteamericanos, y ha convertido el asunto en un motivo de crítica electoral al presidente Barack Obama. Donde otros políticos han expresado pesar por la pérdida de vidas estadounidenses, y han demostrado unidad, Romney ha lanzado ataques políticos, y se ha reafirmado en ellos.

Primero, Romney atacó a Obama, antes de que el presidente dijera nada sobre los ataques. El candidato republicano lo hizo en un comunicado, enviado en la madrugada del martes. “Estoy indignado por los ataques contra las misiones diplomáticas en Libia y Egipto y por la muerte de un empleado del consulado norteamericano en Bengasi”, dijo, antes de que se supiera que los muertos eran cuatro y que entre ellos se hallaba el embajador Stevens. “Es una desgracia que la primera respuesta de la Administración de Obama no sea condenar los ataques contra nuestras misiones diplomáticas, sino simpatizar contra los que perpetraron los ataques”.

Se refería Romney a un comunicado que la embajada de EE UU en Egipto había emitido previamente y en el que condenaba “los esfuerzos continuados de individuos equivocados por herir los sentimientos religiosos de los musulmanes”. Esas palabras obedecían a un largometraje, realizado en EE UU, que satiriza sobre la vida del profeta Mahoma, algo considerado sacrílego en el Islam, y que provocó la ira de diversos grupos religiosos tanto en Egipto como en Libia. Ese texto de la embajada de EE UU se publicó en Internet horas antes de que se confirmaran las muertes en Libia.

En una conferencia de prensa, este miércoles, Romney se reafirmó en sus críticas. “Creo que es un terrible camino para América el pedir perdón por nuestros valores. Cuando nuestros puestos se hallan bajo ataque, y son violados, la respuesta primera de EE UU debe ser indignación por la violación de la soberanía de nuestra nación”, dijo. “Pedir perdón por los valores de América nunca es el camino adecuado”. Posteriormente añadió: “Creo que el presidente Obama adolece de una falta de claridad en política exterior. [Debemos tener] confianza en nuestra causa. Confianza en que los principios en que América se fundó no son algo por lo que pedimos perdón o de lo que nos arrepentimos. Defendemos esos principios”.

En el mismo sentido se pronunció Paul Ryan, el número dos de Romney. “Si muestras debilidad, si muestras evasivas, entonces las osadías de nuestros adversarios en materia de política exterior se verán incrementadas”, dijo en un mitin en Wisconsin. El candidato a vicepresidente fue menos duro en sus críticas a Obama que Romney, y añadió que es “muy importante que un presidente hable con una voz que represente los principios y los valores de todos”.

El resto de líderes republicanos condenaron los ataques, desde el presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, al senador por Florida Marco Rubio. Los senadores conservadores John McCain y Lindsey Graham y el independiente Joe Lieberman condenaron el ataque en un comunicado: “No podemos aceptar la falsa creencia de que la Primavera Árabe ha quedado condenada a ser definida no por el deseo de democracia y libertad que ha inspirado a millones de ciudadanos a tomar acción pacífica, sino por el oscuro fanatismo de los terroristas”.

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