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Virginia amanece con empate técnico en las encuestas a un día de las elecciones

Los habitantes de Richmond, al igual que en el resto del Estado, siguen divididos El martes deciden entre entre los derechos sociales de Obama y la política económica de Romney

Carolina García
Asistentes  al discurso de Joe Biden en Sterling, Virginia.
Asistentes al discurso de Joe Biden en Sterling, Virginia.M. W. (AFP)

A menos de 24 horas para las elecciones, los sondeos en Virginia están más ajustados que nunca. El 48% de los residentes está a favor del presidente de EE UU, Barack Obama, frente al mismo porcentaje que apoya al candidato republicano, Mitt Romney, según una encuesta elaborada por Gravis Marketing. Otras, realizadas por las cadenas de televisión CNN y NBC, dan un margen de victoria de tan solo un 1% para el actual mandatario. Al igual que ocurre en el resto del Estado, los habitantes de Richmond todavía no tienen claro quién va a ganar. En la zona urbana de la capital de Virginia habitan 200.000 mil personas, y los ciudadanos, todavía este lunes -última jornada de campaña-, se debaten casi a partes iguales entre los derechos sociales promovidos por Obama y la política económica que ha prometido Romney durante toda la campaña. De momento han votado de forma anticipada más de 20.000 personas en esta ciudad. Otras tantas, acudirán desde primera hora del martes a los centros de votación repartidos por todo Richmond.

"Aquí la cosa está al 50%. Algunos están muy preocupados por el empleo, por lo que ven a Romney como un candidato eficiente en este aspecto. Otros valoran, en cambio, lo que ha hecho Obama en cuanto a salud y servicios sociales. Yo creo que en cuanto a la economía, nuestra situación en Virginia es como la del resto del país, nos vamos arreglando. Y creo sinceramente que ninguno de los dos candidatos tiene un plan de actuación válido a este respecto. Espero que gane Obama. Aunque el resultado va a estar muy ajustado aquí en Richmond, al igual que en el resto de Virginia y en el resto del país", asegura Hassy Mil, afroamericano de 40 años.

"Yo voy a votar a Romney porque es blanco", dice rotundo Matt Graham, taxista de 47 años. "Tengo que decir la verdad, creo que Obama lo ha hecho bien con Sandy pero es un mentiroso. ¿Cómo va a conseguir una sanidad gratis y accesible para todos cuando existe un déficit tan inmenso en el país?. ¿Cómo lo va a pagar? Yo creo que Romney es el que menos mentiras ha contado durante esta campaña. Voy a votarle", prosigue este hombre, mientras se repite así mismo: "Obama no puede ganar, Obama no puede ganar". "Votaré mañana por Obama, creo que es que el que mejor representa nuestros derechos. Tienes que decir la verdad, aquí los blancos votan a Romney y los afroamericanos votan a Obama; y según bajas hacia el sur, esta situación se hace más patente", asegura Andrew Ruggins, de 45 años y conductor de un autobús en la capital de Virginia.

"Necesitamos un nuevo presidente. Somos americanos, no somos extranjeros. A quien no le guste que se vaya a otro sitio. Si no te gustan las armas y la libertad religiosa, vete", argumenta Robert Weeks, afiliado republicano, mientras pasea de la mano con su novia por Main Street, una de las calles céntricas de Richmond. "Pongo mi decisión en las manos de Dios. Lo importante es que quien pueda vaya a votar. La situación es muy confusa porque ambos candidatos están criticándose de forma muy agresiva en los anuncios, en todas partes. La decisión es difícil. ¿Será capaz Obama de repetir cuatro años y seguir haciéndolo bien? ¿Y Romney será el idóneo, como dice, para levantar la economía y crear tantos puestos de trabajo como presume? Confío en que mis conciudadanos decidirán lo mejor para el país, para este Estado y para esta ciudad", asegura Tom Markee, de 52 años, mecánico e instalador de aire acondicionado en un hotel.

Tanto demócratas como republicanos están agotando sus bazas en la capital de Virginia. Mientras los demócratas, ataviados con sus petos azules, se pasean por las calles de la ciudad puerta a puerta para explicar lo importante que es votar por Obama y esperan con emoción la visita del vicepresidente Joe Biden esta tarde a la ciudad –será a las 17.00 hora local (las 23.00 en la España peninsular), los republicanos en estos momentos continúan llamando por teléfono y visitando a los vecinos de la capital de Virginia. "Creo que le podemos dar la vuelta a los resultados de 2008. Hoy, las cosas están más ajustadas que nunca. El partido demócrata no tiene tantos votos registrados como entonces y el número de absentismo ha aumentado. Ayer, yo misma estuve haciendo campaña y me di cuenta que mucha gente nos apoya", explica Christina McArthur en la sede republicana del partido en Richmond. Romney tiene previsto visitar este lunes por la tarde Fairfax. "Es necesario que nuestro candidato esté presente en el Norte de Virginia por que esa zona es históricamente más demócrata. Miles de voluntarios procedentes de muchos Estados estarán allí con él. Ganaremos", dice con entusiasmo McArthur. "Hay que seguir luchando por ese 4%-5% de indecisos", asegura con prisa una de las voluntarias por Obama en la capital de Virginia.

Tras esta última jornada, en la que ambos partidos intentan arañar votos, el martes los votantes tendrán la palabra. "Tendremos a gente en los puestos de votación dando información y asegurándonos de que todo se realiza correctamente. Que hay juego limpio", finaliza McArthur.

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Sobre la firma

Carolina García
La coordinadora y redactora de Mamas & Papas está especializada en temas de crianza, salud y psicología, y ha desarrollado la mayor parte de su carrera en EL PAÍS. Es autora de 'Más amor y menos química' (Aguilar) y 'Sesenta y tantos' (Ediciones CEAC). Es licenciada en Psicología, Máster en Psicooncología y Máster en Periodismo de EL PAÍS.

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