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Kim Jong-un ordena preparar sus misiles para atacar a Corea del Sur y a EE UU

El líder norcoreano ha pedido tener listos sus "misiles estratégicos", según la agencia KCNA El régimen asiático denuncia que Washington ha sobrevolado Corea del Sur con bombarderos

Soldados surcoreanos en la frontera con Corea del Norte.
Soldados surcoreanos en la frontera con Corea del Norte.JUNG YEON-JE (AFP)

Corea del Norte ha colocado este viernes sus unidades de misiles en posición de espera para atacar las bases de Estados Unidos en Corea del Sur y el Pacífico, después de que el jueves Washington volara bombarderos furtivos B-2 sobre Corea del Sur en el marco de las maniobras militares conjuntas anuales que está realizando con este país.

El líder norcoreano, Kim Jong-un, “ha celebrado una reunión de urgencia” en la madrugada del viernes con altos generales y ha dicho que “en vista de la situación, ha llegado el momento de saldar cuentas con los imperialistas de Estados Unidos”, según ha informado la agencia oficial KCNA. Kim ha firmado un plan de preparación de los misiles y ha ordenado a sus fuerzas que se coloquen en posición de espera para atacar “en cualquier momento” Estados Unidos continental y sus instalaciones militares en Corea del Sur y las islas de Hawai y Guam. El vuelo de los bombarderos indica que la hostilidad de Estados Unidos contra Corea del Norte “ha entrado en una fase imprudente, que va más allá de la amenaza y el chantaje”, ha señalado.

La agencia surcoreana Yonhap ha informado de la existencia de movimientos adicionales de tropas y vehículos en las instalaciones de misiles de medio y largo alcance norcoreanas, según fuentes militares del Sur.

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Los analistas creen que no hay pruebas de que el Norte tenga cohetes que puedan golpear la costa oeste de Estados Unidos o más allá, pero posee misiles de corto y medio alcance, y Seúl está a unos 50 kilómetros de la frontera común.

El anuncio se produce después de que el martes pasado Pyongyang dijera que había ordenado a su artillería y unidades de misiles colocarse “en posición de combate” y estar listas para atacar estos objetivos, y al día siguiente cortara ‘la línea roja’ de comunicación militar con Seúl, que permite a los trabajadores surcoreanos cruzar la frontera para trabajar en Kaesong, un complejo industrial situado en el Norte, que emplea en su mayoría a trabajadores de este país aunque es operado con tecnología y dinero del Sur.

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Washington asegura que dos bombarderos B-2 volaron desde una base en Missouri y dejaron caer el jueves munición ficticia sobre una cadena de islas surcoreanas deshabitadas, antes de regresar a Estados Unidos. Los B-2 han sido utilizados en maniobras militares en el pasado, incluido en 2000 en Corea del Sur, pero esta es la primera vez que hacen un vuelo de ida y vuelta a la península coreana y arrojan bombas inertes, según el Pentágono. Estados Unidos ha afirmado anteriormente que durante las maniobras en curso han participado también bombarderos B-52 con capacidad nuclear.

El anuncio de la orden firmada por Kim Jong-un forma parte del abanico de amenazas e incremento de retórica que ha desplegado Pyongyang en respuesta a los ejercicios militares y las sanciones impuestas por la ONU por la prueba atómica que efectuó el 12 de febrero pasado. Pyongyang ha amenazado con llevar a cabo ataques nucleares preventivos contra Corea del Sur y Estados Unidos y ha declarado roto el armisticio que puso fin a la guerra de Corea (1950-1953).

Las represalias y el aumento de retórica son vistos como un intento de provocar a Seúl para que suavice sus políticas y de presionar para lograr negociaciones directas con Washington, que conduzcan a la consecución de ayuda y el restablecimiento de las relaciones. Al mismo tiempo, forman parte de una estrategia interna para fomentar la lealtad al joven Kim Jong-un y reforzar el papel de los militares.

Mientras tanto, el complejo industrial de Kaesong continúa funcionando, a pesar de la interrupción de la línea de comunicación militar. A falta de esta, los permisos para que transiten las mercancías y los empleados surcoreanos crucen al Norte están siendo dados de forma verbal a través de intermediarios

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