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Las inundaciones complican la votación en 28 ciudades bonarenses

Scioli, gobernador de Buenos Aires, dice que la prensa busca que “la gente vote con odio”

La localidad de San Antonio de Areco, en la provincia de Buenos Aires, anegada por las aguas el pasado viernes.
La localidad de San Antonio de Areco, en la provincia de Buenos Aires, anegada por las aguas el pasado viernes.Mariano Raso (EFE)

Las lluvias que caen desde hace cinco días en la provincia de Buenos Aires están complicando las elecciones presidenciales primarias de este domingo en 28 de los 134 municipios de este distrito, en el que vota el 37% de los argentinos. Unos 62 centros de votación debieron mudarse de sitio por las inundaciones que han afectado a escuelas y otros lugares donde estaba planificado que se sufragase.

“Querían que la gente fuese a votar con odio”, se quejó el candidato presidencial kirchnerista y actual gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, de la cobertura que los medios de comunicación hicieron de la noticia las inundaciones. “El agua está bajando y la gente está volviendo a sus casas”, dijo Scioli.

En Campana (70 kilómetros al norte de Buenos Aires) llegó a haber 1.400 evacuados, algunos por cuenta propia y otros que se macharon a los refugios que dispuso el municipio, en manos kirchneristas. En otros distritos de la provincia, como San Antonio de Areco, Luján y Pilar, hubo otros 1.600. En todos estos casos, las familias comenzaron a regresar a sus casas este sábado, después de una o dos noches fuera. Claro que los pronósticos meteorológicos provocaban temor porque se anuncian tormentas para la tarde de este domingo.

Algunos inundados iban a sufragar contra el kirchnerismo, pero otros no acudirían a votar

Camiones municipales de Campana iban este sábado cargados de evacuados para redistribuirlos en sus hogares. Familias enteras bajaban de ellos con bolsas de alimentos para afrontar los próximos días. Además necesitarán colchones y ropa porque el agua les ha arruinado todo.

Militantes del candidato presidencial centroderechista, Mauricio Macri, también repartían en esta misma ciudad bonaerense alimentos donados por sus seguidores para los afectados por la inundación. Días atrás, antes de las lluvias, esos mismos militantes habían distribuido en campaña electoral juguetes y palomitas de maíz a los niños pobres. También los peronistas opositores ayudaban este sábado a los inundados de Campana. Las organizaciones católicas, sociales y deportivas hacían lo suyo para aplacar la falta de comida.

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“Hay mucha bronca contra la intendenta y van a votar en su contra”, se refería Marta, una vecina, a la alcaldesa kirchnerista de Campana. “Las máquinas de bombeo agua no funcionaron. Pero algunos dicen que las sabotearon los de Macri”, añadía Marta. Otra vecina, Florencia, decía, en cambio, que muchos vecinos no planeaban ir a sufragar este domingo. Estaban demasiado ocupados en buscar alimento y recomponer sus casas como para irse al nuevo centro de votación dispuestos por las autoridades. “Hay bronca contra todos los políticos”, comentaba Florencia.

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