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Los nueve ‘imperdibles’ del libro de Donald Trump

Compara el muro de Israel con el que pide para separar México de EE UU y confiesa que "da a los medios lo que quieren" cuando dice algunas barrabasadas

Amanda Mars
Donald Trump, en la firma de su libro este martes en Nueva York.
Donald Trump, en la firma de su libro este martes en Nueva York.Noam Galai (WireImage)

¿Por qué Donald Trump pone cara de enfado en la cubierta de su último libro? Porque ve pocos motivos para estar contento hoy con Estados Unidos. Eso es lo primero que explica en Crippled America. How to make America great again, que se traduciría al español como América paralizada. Cómo hacer que América sea grande de nuevo y supone un manifiesto personal y político del más estridente precandidato republicano a las elecciones presidenciales de 2016. En unas 200 páginas, el empresario neoyorquino se define como un líder, un triunfador, un defensor de los inmigrantes y un feminista pese a la retahíla de exabruptos que en los últimos meses pondrían tales aseveraciones en cuestión.

También se ha puesto a la venta en CD, así que cualquier interesado que no le apetezca leer se puede poner los discos en casa y escuchar las ideas de Trump, con la ventaja de que el prefacio se lo narra el propio empresario. Leídos o escuchados, estos son nueve ‘imperdibles’ de la obra:

1. “He sido un líder toda mi vida”. El estilo es tan directo como en sus discursos: “No fanfarroneo cuando digo que soy un triunfador. Tengo experiencia en ganar. Es lo que llamamos liderazgo. Significa que la gente me seguirá y se sentirá inspirada por mí. ¿Cómo lo sé? He sido un líder toda mi vida”. Aun así, Trump se siente diana de ataques inmerecidos pero asegura no importarle demasiado. “Tengo una mujer maravillosa y preciosa. Tengo miles de millones de dólares. Mis hijos son muy inteligentes y unos ejecutivos resueltos que trabajan para mí”, explica como argumento.

2. “Gané 213 millones en El Aprendiz”. Le gusta hablar de su fortuna y en el libro le dedica un capítulo. Afirma que su patrimonio actual supera los 10.000 millones de dólares y que sus ingresos este año quedarán por encima de los 600 millones. Se declara, además, uno de los conferenciantes mejor pagados del mundo –se embolsó cinco millones en 2011 por hablar en dos ciudades en Australia - y le ha ido bien en la televisión: “Durante las 14 temporadas de El Aprendiz gané 213,6 millones de dólares”. Los más de 10.000 millones de fortuna le parecen exagerados a Bloomberg, la mayor base de datos financieros del mundo, que concluyó que su riqueza se acerca a los 2.900 millones de dólares basándose en el mismo informe. Forbes tampoco lo veía superior a los 4.100 millones.

3. “Le doy a los medios lo que quieren”. Trump es perfectamente consciente de cuándo cae en la extravagancia: “Soy un hombre de negocios con una marca que vender”, dice, y afirma que a veces hace “comentarios indignantes” para darle a los medios “lo que buscan”. Los utiliza, dice. “El precio de un anuncio a toda página en The New York Times puede ser de más de 100.000 dólares, pero cuando publican una noticia sobre alguno de mis negocios, no me cuesta un céntimo, y tengo una repercusión más importante”. Ve sesgadas la informaciones políticas: “No me ha llevado mucho tiempo ver lo deshonestos que pueden ser los medios políticos”. Trump recuerda también el altercado con Megyn Kelly, una periodista estrella de la Fox, y dice que esta “fue a por él” en el primer debate republicano.

4. “Amo la inmigración”. Muchos de esos comentarios polémicos tienen que ver con la inmigración. La salida a escena de Trump en la carrera republicana estuvo marcada por su discurso sobre la inmigración ilegal y los insultos a los mexicanos. En el libro se queja de la mala interpretación de sus palabras, recuerda que sus padres eran inmigrantes, pero reclama la expulsión de todos los irregulares. Asevera: “Amo la inmigración” y su esfuerzo por el “sueño americano”. Pero alerta de que “los países del sur no nos están mandando a su mejor gente”. Trump evoca a los marielitos, los más de 125.000 cubanos a los que Castro permitió emigrar a EE UU en 1980 y a los que el presidente Carter abrió la puerta. El dictador cubano aprovechó para liberar las cárceles de presos comunes y mandarlos a la gran potencia económica. “Treinta años después aún estamos lidiando con eso”, dice Trump.” “¿Alguien cree que el Gobierno de México y de otros países del sur y de Centro América no han captado el mensaje?”, alerta.

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5. “Los muros funcionan. Israel gastó dos millones por kilómetro en el suyo”. El precandidato defiende de nuevo la idea de construir un muro de separación entre EE UU y México para evitar la entrada de inmigrantes ilegales. Lo compara con Oriente Próximo. “Los muros funcionan. Los israelíes gastaron dos millones por kilómetro para construir uno que ha tenido mucho éxito en parar a los terroristas que quieren entrar en el país”, dice, “pero irónicamente mucha de la gente que dice que no debemos construir el muro cita el éxito del de Israel”. El muro, “que debe empezar a construirse cuanto antes”, dice lo pagará México de forma directa o, dice, incrementándole las tarifas de las fronteras o recortando las ayudas.

6. “Trato a hombres y mujeres por igual”. En la retahíla de polémicas de Trump de los últimos meses también figuran varios comentarios machistas. En el libro se defiende: “Mis sentimientos positivos hacia las mujeres se ven reflejados en el número de mujeres que trabajan en mis organizaciones. Puse a mujeres en puestos importantes mucho antes de que nadie lo hiciera porque sabía que podían con ello”. “Les pago lo mismo, las asciendo del mismo modo y, cuando la pifian, las despido igual”, recalca. “Fui el primer promotor en poner a una mujer al frente de una gran obra en Nueva York”, recuerda también.

7. “Si vamos a ser la policía del mundo, que nos paguen”. El magnate defiende que EE UU mantenga sus Fuerzas Armadas como las más fuertes del mundo -“Si no quieres usar tu poder militar, hazlo visible”, dice- , pero advierte de que eso no debe salirle gratis a la comunidad internacional. “Si vamos a seguir siendo la policía del mundo, debemos ser pagados por ello”. Recalca. Y cita a países “poderosos y ricos” como Arabia Saudí, Alemania, Japón y Corea del Sur, a los que defienden sin recibir nada a cambio.

8. “Las armas no son el problema, los criminales lo son”. Trump y sus dos hijos varones son miembros de la Asociación del Rifle. El empresario defiende la propiedad de armas y pide mano dura para los que las tienen de forma ilegal, es la forma que reducir muertes violentas, cree. “Las armas no son el problema, los criminales peligrosos son el problema”, recalca. Y critica que algunos sectores “quieren que la policía haga su trabajo con una mano atada a la espalda”.

9. “Dinero y felicidad no es lo mismo”. Aunque la exhibición de riqueza es una constante en su discurso, Trump asegura que la fortuna no siempre es la clave en la vida. “No voy a fingir que ser rico no te dé oportunidades maravillosas. Pero no te hace feliz necesariamente. He aprendido que felicidad y riqueza son dos cosas completamente diferentes”. La clave son los “valores”, tal y como se titula uno de los capítulo del libro, en el que recuerda que fue un joven algo gamberro y elogia lo bien que “las madres de sus hijos” han criado a su descendencia.

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Sobre la firma

Amanda Mars
Directora de CincoDías y subdirectora de información económica de El País. Ligada a El País desde 2006, empezó en la delegación de Barcelona y fue redactora y subjefa de la sección de Economía en Madrid, así como corresponsal en Nueva York y Washington (2015-2022). Antes, trabajó en La Gaceta de los Negocios y en la agencia Europa Press

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